Las imágenes difundidas por el periódico estadounidense New York Times muestran al ex mandatario acompañado por el embajador húngaro y su personal de seguridad entrando a la sede diplomática.
Los testimonios sitúan al ex mandatario en el centro de un complot para declarar la ley marcial e impedir que el ahora presidente brasileño, máximo referente del PT, llegue al poder luego de ganar las elecciones de 2022.
Se trata de Bernardo Romao Correa Netto, acusado de haber organizado el 28 de noviembre de 2022 una reunión de oficiales de las Fuerzas Especiales del Ejército para planear un golpe de estado, un mes después del balotaje que consagró al actual presidente.
Son tres los mandatarios europeos, además de Felipe VI, y cuatro los sudamericanos que participaron de la asunción del actual presidente en Congreso.
En los últimos años pasó por varias cirugías y otras intervenciones en la región abdominal debido a una puñalada que sufrió en 2018 durante la campaña proselitista para las elecciones en las que resultó victorioso.
En una nueva emisión de Café Internacional, los conductores del programa, Emilio Ordoñez y Santiago Toffoli, hablaron sobre las manifestaciones que tienen lugar en Francia luego de que la policía de ese país asesinara al joven Nahel M.; la inhabilitación política por ocho años del expresidente brasileño Jair Bolsonaro, quien estaba acusado de abuso de poder; y la incursión del ejército israelí en el campo de refugiados de Jenin, al norte de Cisjordania.
Así lo determinó la Justicia Electoral brasileña, tras condenarlo por abuso de poder por diseminar mentiras y sospechas infundadas sobre el sistema de comicios de Brasil ante embajadores extranjeros.
El Gobierno de Lula confía en que este espacio parlamentario pueda alcanzar al que fuera secretario de Justicia de Bolsonaro y encargado de Seguridad de Brasilia durante los ataques, Anderson Torres, a quien se le encontró en el domicilio el borrador de un 'decreto golpista'.
Se trata del Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria, una iniciativa destinada a erradicar el hambre en Brasil y que fue derogada por la gestión de Jair Bolsonaro.
El juez del Tribunal Supremo (TSF) Alexandre de Moraes lo investiga por presunta "omisión y connivencia" durante el asalto a las sedes de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
El interior del Congreso, el Supremo Tribunal Federal y el Palacio del Planalto fueron desocupados este domingo luego de una operación que contó con la tropa de choque y el lanzamiento de gases lacrimógenos desde helicópteros.
Los manifestantes estaban en las oficinas de los colaboradores de Lula y rompiendo los objetos a su paso. También ocuparon el edificio de la Corte. Lula decretó la intervención federal.