La empresa Acindar de la ciudad de Villa Constitución accedió a reincorporar a tres de los trabajadores despedidos luego de vencidos los plazos de la conciliación obligatoria, en tanto que procura reubicar a otros tres operarios «en otra planta y por afuera del convenio colectivo de la Unión Obrera Metalúrgica» (UOM), aseguró hoy el personal.
«Se trata de una propuesta tramposa», aseveró el gremio local, por lo que los trabajadores solicitaron diez días corridos para debatir con las bases y decidir «los pasos a seguir», indicó.
El miércoles pasado se realizó la última audiencia en el marco de la conciliación obligatoria dictada en su momento por el despido de doce trabajadores (6 efectivos y otros tantos contratados) en la acerí­a Acindar de Villa Constitución, que expiró ese mismo dí­a.
Los representantes de la patronal accedieron a reincorporar a otro de los cesanteados en el sector de colada continua, el área que registra los más elevados í­ndices de siniestralidad laboral.
De los seis trabajadores de planta despedidos ya son tres los que reingresaron a sus tareas, por lo que ahora se discute respecto de los otros tres, a quienes la compañía procura reubicar en la planta Heredia, un centro de distribución y logí­stica que Acindar tiene en Rosario, aunque por afuera del convenio de la UOM.
«Es una propuesta tramposa porque puede salir bien o mal, ya que ese personal no tendría la protección del
sindicato. Por lo que fue rechazada», explicó Silvio Acosta, integrante de la Comisión Gremial Interna (CGI) y secretario general de la Central de los Trabajadores Argentinos Autónoma (CTAA) de Villa Constitución.
Además, la patronal también realizó a esos tres obreros despedidos un ofrecimiento monetario, por lo que requirieron diez dí­as corridos para analizar la situación con sus pares de labor.
A partir de esa propuesta, el personal determinó desde el jueves último un cronograma de asambleas por sectores (seis diarias) para analizar con «las bases la situación y decidir qué hacer».
En la audiencia del miércoles en la sede rosarina del Ministerio de Trabajo participaron la viceministra Nora Ramí­rez; una veedora de esa cartera nacional; representantes de la empresa e integrantes de la comisión directiva de la UOM local y de la CGI. La situación de los contratados se discute de forma paralela.
«Los delegados y el gremio flexibilizaron sus posiciones respecto de las reubicaciones. La empresa también aflojó, pero con una propuesta tramposa. Se discutirá ahora con las bases, aunque no se descarta retomar las medidas de fuerza», adelantó Acosta.
Foto: Salvador Hamoui