El secretario general de la CGT Alsina, Antonio Caló, aseguró que las tres centrales obreras impulsarán en el Congreso la «emergencia laboral», que entre sus puntos principales incluye la vuelta de la doble indemnización «ante la posibilidad de despidos masivos».

«Ante la posibilidad de despidos masivos, queremos que se aplique la doble indemnización», sostuvo Caló en una entrevista con el diario La Voz del Interior.

La doble indemnización por despido fue la parte sustancial de la «emergencia laboral» que como parte de la emergencia económica se aplicó por ley desde 2002 hasta 2007, cuando se cumplió el requisito legal de un desempleo de menos de dos dígitos para que fuera levantada.

La iniciativa fue impulsada tanto por el líder metalúrgico como así también por los jefes de las otras dos CGT, Hugo Moyano (Azopardo) y Luis Barrionuevo (Azul y Blanco).

«Les dijimos a los diputados que la pidan. No sé qué otras medidas, pero en principio la indemnización doble», precisó Caló, quien añadió que las medidas están avaladas tanto por Moyano como así también por Barrionuevo.

«Estamos preocupados. Acá partimos de la base de que si nos va mal a los metalúrgicos y a los demás gremios industriales, después les va mal a los camioneros, porque no van a tener qué transportar, y a los gastronómicos, porque no van a tener clientes. Por eso, cuando le va mal a uno, nos va mal a todos», explicó.

Respecto a las paritarias, afirmó que por la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) pedirán un aumento que tenga «un piso de por lo menos el 30 por ciento y en dos tramos, en abril y en julio».

«Pero el panorama que se vislumbra es negro, porque podemos perder puestos de trabajo. Hoy tenemos el problema de las empresas que hacen caños y bridas para el sector petrolero, que se están quedando sin trabajo. Como viene la mano, 10 mil a 15 mil trabajadores metalúrgicos se quedarán en la calle en dos meses si este panorama no cambia», advitió.

Caló consideró que el balance de estos 80 días con Mauricio Macri como presidente «es negativo para los trabajadores» y agregó que esperaban «que en marzo mandara la corrección de la ‘tablita’ de Ganancias y no salió, porque el aumento del mínimo no imponible a 30 mil pesos tampoco soluciona el problema, debido a que casi 200 mil trabajadores entran a pagar Ganancias».

«Además, hubo aumentos desmedidos en los precios. Una docena de facturas valía 40 y ahora vale 80 pesos, dicen los muchachos. Y la canasta familiar aumentó desmedidamente. El resto de las medidas de política económica han sido en beneficio de los sectores más concentrados», evaluó.