LUNES, 07 DE OCT

Con una gran caravana, municipales y estatales protestaron en defensa de las paritarias

La manifestación visibilizó el rechazo de diversos sectores gremiales a las sumas en negro y la falta de comunicación con las autoridades en medio de la emergencia sanitaria, económica y social.

Distintos gremios locales se movilizaron este jueves por la ciudad para defender las paritarias y repudiar el ofrecimiento de sumas en negro como mecanismo de actualización salarial. La caravana inició en el Monumento Nacional a la Bandera y, luego de pasar por varios efectores de salud, concluyó frente a la sede local de Gobernación.

La manifestación tuvo como objetivo visibilizar el rechazo de diversos sectores gremiales a las sumas en negro y la falta de comunicación con las autoridades en medio de la emergencia sanitaria, económica y social.

Entre los sectores que conformaron la amplia caravana que recorrió la ciudad se encontraban el Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario, Amsafe Rosario, Amra, Siprus, ATE-Rosario y Pami zona norte, entre otros.

Según detallaron los gremios ante Conclusión, la concentración inició a las 8 de la mañana en el Monumento Nacional a la Bandera, para luego trasladarse por Santa Fe.

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El recorrido posterior fue: Láprida; 9 de julio; Alem; Zeballos; nuevamente Láprida, para pasar por el Hospital Provincial; Av. del Rosario; Corriente; Uriburu; Italia; Pellegrini; Avellaneda; San Luis; Moreno y finalizó frente a la sede de Gobernación. 

Este trayecto le permitió a la caravana pasar por las puertas de distintos efectores de salud de la ciudad, como el Hospital Provincial, el HECA, el Roque Saez Peña, el Carrasco y el Cemar.

«Vamos a pasar con la caravana para solidarizarnos con ellos y visibilizar el problema de los trabajadores municipales», explicó al comienzo del día el secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario, Antonio Ratner, en dialogo con Conclusión.

Los manifestantes marcharon bajo consignas como «con aplausos no se come» y sosteniendo la exigencia del pago del bono de 5.000 pesos anunciado por el Gobierno provincial.

Respecto a los 3.000 pesos ofrecidos en negro, el dirigente del gremio municipal señaló que las autoridades al presentarlo «no saben ni cómo llamarlo: bono, ayuda o dádiva. No saben qué hacer, se tienen que sentar con los trabajadores a discutir una política salarial».

Además, los trabajadores estatales de diversas reparticiones protestaron en defensa de la clausula gatillo como mecanismo de actualización salarial, ya que esta política les permite contener el poder adquisitivo ante al avance inflacionario.

«Nos dijeron que la cláusula gatillo generaba inflación y era perversa. Además nos manifestaron que el Gobierno provincial tenía una propuesta superadora para hacerle a los trabajadores, pero llegamos al mes de agosto sin cláusula gatillo, sin propuesta superadora e igualmente tenemos inflación. Que se pongan de acuerdo y se sienten a discutir», remarcó Ratner.

Maleducados

Amsafe Rosario también formó parte de la caravana que concluyó ante la sede de Gobernación y destacó que durante la movilización pasaron por el frente de varias instituciones educativas.

«Ha sido una inmensa caravana con centenares y centenares de autos. Esa es la unidad que necesitan los trabajadores y las trabajadoras para enfrentar a un Gobierno que ha otorgado un bono que es una afrenta. El pueblo santafesino sabe reconocer el esfuerzo mientras los gobernantes tienen un nivel de insensibilidad y destrato muy grande», aseveró Gustavo Terés, delegado de Amsafe Rosario, en dialogo con Conclusión.

Para el dirigente del gremio docente, las demandas que le presentan al Estado desde el inicio de la pandemia son urgentes, ya que están relacionadas a achicar las desigualdades sociales que la emergencia sanitaria ha expuesto.

«El reclamo no es solo porque no discutimos con ellos salarios, sino que no estamos discutiendo en conjunto cómo apoyar garantizar los derechos de las infancias. Cerca del 70 por ciento de los chicos de los sectores vulnerables no están conectados (a las clases virtuales) y el Estado es responsable«, alertó Terés.

El bono de 3.000 pesos consiguió el rechazo unánime de todos los sectores. Los trabajadores recibieron el ofrecimiento como una ofensa y una falta de reconocimiento a las labores realizadas durante la emergencia.

El personal de salud nucleado en Siprus participó de la movilización masiva para exponer la actitud estatal ante los reclamos de quienes están en la primera línea de atención.

«Le pedimos al Gobierno que abra la paritaria para discutir condiciones de trabajo y la precariedad que hoy reina en el Estado y en la salud provincial con más de 1.500 profesionales que trabajan en negro en las guardias y las terapias», detalló Diego Ainsuain, presidente de Siprus, ante Conclusión

El referente gremial del personal de salud también aclaró que los anuncios grandilocuentes que se hacen ante cámara no tienen después su correlato en la una mejora de las condiciones laborales del personal esencial.

«La semana pasada nos enteramos de que en el hospital que se inaugura para Covid no se alcanzan a llenar las vacantes porque a los compañeros que trabajen ahí les ofrecen un contrato por tres meses y un sueldo sueldo de 43.000 pesos. Algo prácticamente igual a la canasta familiar de pobreza«, ejemplificó.

Estado de precariedad

La unidad de los trabajadores estatales fue celebrada por cada uno de los gremios. Desde ATE Rosario se mostraron impresionados por el nivel de adhesión a la movilización y anticiparon que profundizarán las medidas de fuerza si no consiguen una respuesta satisfactoria.

«Estuvimos todos los sindicatos estatales porque nos une el mismo reclamo: rechazar este bono mediático, del que nunca leímos un decreto que lo confirme, que equivale a dos bolsones de alimentos en el mes. No podemos aceptar este ofrecimiento», apuntó la secretaria general de ATE Rosario, Lorena Almirón, el conversación con Conclusión.

La sindicalista recordó que, a diferencia de los docentes «que tuvieron ofrecimientos salariales miserables», a los estatales «directamente no les han dado respuesta».

«Lo que ha hecho el Estado es algo verdaderamente vergonzoso. Debería ser el ejemplo de lo que se les exige a los privados, lo que se pide afuera hay que cumplirlo adentro», expresó en la misma sintonía la secretaria general adjunta del Sindicato de Trabajadores Municipales, Yamile Baclini.

«Acá nadie exige algo irrisorio o impagable, estamos pidiendo que se nos recomponga el salario», agregó.

La multitudinaria manifestación concluyó frente a la sede local de Gobernación y los gremios presentes anticiparon que evaluarán las siguientes medidas a la par de la reacción estatal.

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