La Cámara de Empresas de Operaciones Petroleras Especiales (CEOPE) solicitó al Ministerio de Trabajo la segunda etapa del Procedimiento Preventivo de Crisis en Neuquén, ya que planean suspender 5 mil trabajadores. Al mismo tiempo, solicitó extenderlo a las provincias de Santa Cruz, Salta, Mendoza, Jujuy, Formosa y Chubut. Los gremios del sector ya pusieron la voz de alerta e iniciaron las gestiones para evitar el aval de la cartera laboral a los empresarios.

El Procedimiento Preventivo de Crisis es un dispositivo contemplado en la Ley de Contrato de Trabajo por la cual la empresa evita despidos al suspender a sus trabajadores y pagarles el salario mínimo sin todos los adicionales durante un tiempo, en el que las empresas están exentas de pagar las cargas sociales al Estado. La CEOPE argumenta que en los últimos seis meses se desplomó la actividad en los yacimientos.

Para los sindicatos es una medida regresiva porque significa una pérdida de ingresos netos de sus afiliados y para la cámara empresaria es la única posibilidad de evitar despidos, por lo cual se avecina una negociación dura. Se estima que, por ejemplo, en las provincias de Chubut y Santa Cruz, 5000 trabajadores serían alcanzados por la medida.

En la documentación presentada ante el Ministerio de Trabajo, los representantes de la CEOPE indican que el pedido de continuar y extender el Procedimiento se basa en: “la fuerte disminución de la actividad de las compañías de servicios que conforman la cámara, como consecuencia de la menor demanda de las empresas operadoras y la imposibilidad de seguir sosteniendo una estructura de costos sobredimensionada para el actual nivel de actividad y elevada en dólares respecto a sus valores históricos y en términos internacionales”.

La provincia que más se opone a esta posibilidad es Chubut. Tras las declaraciones del gobernador Mario Das Neves, se conocieron las del secretario general del Sindicato de Petroleros Privados de Chubut, Jorge Ávila, quien remarcó: “Todos los trabajadores, casi 600 personas, repudiaron todo lo que la CEOPE salga a decir porque no tiene explicación”.

“En este contexto lo vemos más como una provocación que un tema para mantener la paz social, creo que Adolfo Sánchez Zinny (presidente de la cámara) ha equivocado el rumbo. Se dicen operadoras y ponen a los trabajadores para que le salgamos a vender petróleo, nosotros somos un sindicato no vendedores de petróleo”, agregó el dirigente petrolero.