Ante la caída en la ventas, Garbarino cerraría la mitad de las 152 sucursales tiene distribuidas en todo el territorio nacional con alrededor de 4300 empleados en total.

Los trabajadores se encuentran en estado de alerta desde hace varios meses por la situación, y en las últimas horas están expectantes ante los rumores de cierre.

En marzo de 2019 la compañía anunció que pagaría los salarios de sus trabajadores en cuotas como primera medida para paliar la situación de crisis y sostener los negocios a pesar de la caída en las ventas, por lo que además se activaron las negociaciones para que algún fondo inversor se haga cargo de la casa de electrodomésticos.

El fondo Inverlat, dueños de la marca Havanna, estuvo a punto de hacerse cargo de la cadena de electrodomésticos, pero finalmente la operación se canceló luego de trabarse en la negociación con las empresas proveedoras a las que Garbarino les debe sumas cercanas a los 7 mil millones de pesos.