Distintos referentes del movimiento obrero local se manifestaron expectantes respecto del nuevo Gobierno que se viene, y se expresaron sobre la realidad de cada sector, a la vez que se mostraron a favor de seguir «de cerca» las futuras políticas del gobierno que asumirá el próximo 10 de diciembre. No admitieron retrocesos en las conquistas de los trabajadores y condicionan apoyos.
Dragado y Balizamiento
Edgardo Arrieta, del gremio de Dragado y Balizamiento de la región, decidió dar un mensaje a los trabajadores del sector y a la comunidad toda, manifestó «que sea quien sea el ganador es voluntad del gremio defender las fuentes de trabajo y los derechos conquistados» ratificando de esta manera «las acciones que se llevaron adelante en señal de protesta por las políticas nacionales del actual gobierno».
El representante de los trabajadores del río sostuvo que «fue una decisión difícil porque no había claridad sobre lo que se proponían respecto de la marina mercante», y agregó que en tanto no «haya garantías acerca de las políticas que se instrumentarán en el sector» los trabajadores tomarán sus recaudos a futuro y si «sienten que sus derechos vuelven a ser avasallados estarán reclamando lo que legítimamente corresponda a los trabajadores».
Luz y Fuerza
Por su lado, el secretario general de Luz y Fuerza de Rosario, Alberto Botto, dijo que los trabajadores estarán de aquí en más «atentos y expectantes cuales serán las medidas del gobierno, porque se han logrado conquistas estos últimos años, Macri cambió en varias oportunidades el discurso y genera dudas».
Botto refirió que los trabajadores del sector esperan que el presidente electo respete «la política de paritarias, los derechos de los trabajadores, jubilados, a los estudiantes y sus programas que garantizaron inserción y capacitación para el trabajo y la inclusión».
El lucifuercista consideró que se echaron las bases de una Argentina moderna, a través de «la investigación aplicada a la tecnología y los proceso productivo».
Las reservas, para el representante de los trabajadores de la energía, las focalizó en que no aceptarán «retornar a las políticas del 90, y ratificó la decisión de no acompañar políticas de privatización y gerenciamientos privados. No hay lugar para la nacionalización de empresas -dijo Botto- sólo aceptaremos la estatización porque la energía como recurso estratégico debe ser tomada como patrimonio de los argentinos, al servicio de lo público y en la máxima expresión de lo que conceptualmente conocemos como función social».