Por Jennifer Hartkopf

La refinería San Lorenzo afronta desde septiembre del año pasado un panorama cada vez más desolador. Día a día la situación se torna más preocupante para la histórica destilería, único polo productivo de la firma Oil Combustible (ex grupo Indalo) que actualmente atraviesa un concurso de acreedores, y una comprometida realidad financiera y judicial.

Después de funcionar durante 80 años seguidos sin pausa, hoy se encuentra “prácticamente vacía en materia de stock de combustible, con un estado de iliquidez absoluta y una probabilidad muy grande de una declaración de quiebra”, según describió en diálogo con Conclusión el secretario general del Sindicato Unido de Petroleros e Hidrocarburíferos (Supeh), Gerardo Canceco.

“La firma Oil Combustible está con un concurso de acreedores y una situación financiera casi en estado terminal, con una probabilidad muy grande de que los sueldos de marzo no puedan ser abonados”, vaticinó el gremialista tras analizar el último informe presentado por los coadministradores judiciales.

Asimismo, en el día de ayer, se presentó un escrito solicitando al juez que participa en la causa pedir aclaraciones respecto de un programa de emergencia que fue presentado el lunes con el que se hace una propuesta a través de dos empresas: Pampa Energía y Trafigura.

“Son dos propuestas distintas con las que estas empresas se comprometen a proveer el combustible para que Refinería pueda suministrar a su red de estaciones de servicio”, precisó el gremialista pero en seguida aclaró que no todo es lo que parece: “Lo que primero surge de esas propuestas es que los valores a los que proveerían el combustible serían abusivos, por eso se solicitó preguntar a las dos empresas por qué la aplicación de esos valores”.

En el caso de que no se aprueben esas propuestas, refinería San Lorenzo seguiría sin combustible necesario para proveer a sus estaciones de servicio, lo que ya está ocasionando la pérdida de muchas de las estaciones de servicio que pertenecen a la red de refinería.

Riesgo ambiental

Sumado a la compleja encrucijada impositiva y a un no menos complicado entramado judicial, la situación de la refinería presenta también complicaciones en el plano ambiental.

Paralelamente al informe presentado por los coadministradores judiciales, se presentó un informe por parte de la propia gerencia de Medio Ambiente y Seguridad Industrial de la empresa, que manifiesta la existencia de un programa de contingencia que, en cierta manera, aseguraría dos meses de cobertura en materia de riesgos de seguridad industrial o de impacto ambiental.

Pero el inconveniente radica en que una vez que se termine de cumplir con esos dos meses de plazo del programa “la situación es de completa incertidumbre y si no se garantiza, como mínimo, una dotación de al menos 80 personas que sigan realizando tareas de mantenimiento, habría graves riesgos para la comunidad de San Lorenzo en materia de impacto ambiental”, expresó preocupado Canceco haciendo referencia a la gran cantidad de material inflamable que permanecería en las instalaciones.

Las consecuencias podrían derivar en derrames subterráneos y posibles fugas por corrosión de las instalaciones.

La planta tiene actualmente 24.500 litros de combustible en tanques y ductos, además del que periódicamente es retirado de las napas mediante el accionar de 82 bombas para evitar que se derrame y contamine tanto a barrio Norte como al río Paraná.

Embrollo judicial y ahogo financiero

El grupo inversor OP Investments encabezado por Ignacio Rosner y Santiago Dellatorre, apareció hacia fines del año pasado adquiriendo el paquete accionario de Indalo (actual grupo Ceibo) y hoy son los encargados del gerenciamiento de la destilería.

Pero el nuevo gerenciamiento parece seguir la línea del detenido Cristóbal López: los coadministradores judiciales presentaron dos informes donde señalan una serie de irregularidades graves.

“Tanto Rosner como Dellatorre hicieron retiros por 5 millones de pesos en concepto de honorarios. También se registraron como empleados de la empresa, a pesar de ser los gerenciadores, con una registración retroactiva al mes de diciembre, agravando aún más la situación y llevando a que la refinería hoy esté prácticamente vacía en materia de stock de combustible”, lamentó Canceco.

En los últimos cuatro meses se venció todo el stock que la firma tenía almacenado, y según estimaciones del gremio, se trata de 60 millones de dólares que no se utilizaron para ser reinvertidos en la refinería sino que fueron derivados a otra empresa que pertenece al grupo Indalo, la constructora CPC.

Pero eso no es todo. Aun hay más. La nueva conducción de Oil, para seguir funcionando y adquiriendo materia prima, dejó de pagar el Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC), por lo que la Justicia los volvió a asimilar a la gestión anterior -el ex grupo Indalo debe a la Afip unos $ 8.000 millones por el no pago del ITC, razón por la cual el propio López y su lacayo Fabián de Sousa están en prisión-.

Camino a la quiebra

El panorama no es alentador y el tiempo apremia. “Lo que avizoramos en el expediente del concurso de acreedores es que hay una probabilidad muy grande de una declaración de quiebra, casi inminente, por el informe de los coadministradores que señala el estado de iliquidez absoluta de la empresa y la imposibilidad de afrontar sus deudas”, manifestó Canceco a Conclusión preocupado.

En ese contexto, el sindicato insta a los trabajadores a que utilicen la herramienta que les otorgan los artículos 48 y 48 bis de la Ley de Quiebras que es la conformación de una cooperativa de trabajadores a través de la presentación de una propuesta para hacerse cargo del establecimiento.

“Como sindicato creemos que en el estado de situación actual es la alternativa que tienen los trabajadores. Quizás una última herramienta para que no queden totalmente desamparados, de forma que ante una eventual declaración de quiebra el juez se vea compelido a ofrecer a los trabajadores el establecimiento, porque así lo indica la ley”, explicó.

Con el último aliento

Oil Combustible tiene a cargo 400 empleados de modo directo, y aproximadamente otros 400 de manera indirecta, entre empresas contratistas y provisiones de combustible. En este último, hay cerca de 120 trabajadores que están nucleados en el sindicato de Camioneros.

Para unos y otros la fuente laboral pende de un hilo.“Los agrupados en Camioneros están más afectados que los propios empleados de la refinería, porque todavía no han percibido los pagos de los viajes que realizaron durante el mes de febrero”, reveló Canceco y agregó: “Para los trabajadores directos el pago de haberes de marzo es un incierto, ya anticiparon que no saben si van a poder concretarlo”.

Actualmente, en refinería San Lorenzo está paralizada tanto la producción como el despacho de combustibles ya que los intentos de la firma administradora OP Investments por generar operaciones de comercialización fueron impedidas por la Afip.

Costado político del caso

La inquietud de los trabajadores alcanzó también el plano político y tanto representantes legislativos como ejecutivos fueron notificados y advertidos respecto de la crítica situación que atraviesa la petrolera.

Primero mantuvieron una reunión con la comisión de Asuntos Laborales de la Cámara de Diputados provinciales, donde aprobaron una declaración sobre la preocupante realidad de la refinería.

Luego, la semana pasada, mediante una gestión realizada por el senador justicialista Armando Traferri, se reunieron con el ministro de Trabajo, Julio Genesini, y la ministra de Producción, Alicia Ciciliani.

Durante el encuentro, ambas autoridades provinciales se comprometieron a tomar cartas en el asunto, pero según dijo Canceco “hasta el momento no hubo novedades sobre si realizaron algún tipo de gestión frente a sus carteras en el plano nacional”.

Dada la gravedad de la situación, los trabajadores aspiran a que haya algún pronunciamiento también por parte del gobernador Miguel Lifschitz, que hasta el momento solo manifestó que es un problema a resolver por el gobierno nacional.

“Según declaraciones del gobernador, Nación ha decidido que la empresa no es viable, y Provincia le pasa la pelota a Nación. Lo cierto es que nos genera mucha preocupación, porque no hace más que revelar que ni uno ni otro tienen una intención firme de intervenir en el tema y tratar de encontrar una solución”, cerró indignado.

La planta está estratégicamente localizada sobre la hidrovía del río Paraná y en el corazón agrícola de la Argentina. Su estructura permite procesar 8.000 m3 por día de crudo, lo que representa el 8% de la capacidad de refinación de todo el país.

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