El transporte de pasajeros por colectivos de la ciudad de Santa Fe quedó paralizado durante la mañana de este martes debido a asambleas de choferes que rechazan la intervención de la Seccional de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) por parte del Consejo Directivo Nacional del gremio, informaron voceros gremiales.
Las medidas comenzaron a las 8.30 y se extendieron hasta pasado el mediodía en todas las líneas de colectivo de la ciudad, salvo las 4 y 14, cuyas unidades circulaban con normalidad.
En cambio, no prestaban servicio las líneas gestionadas por las empresas Ersa, Autobuses y Continental, además de algunas de trayecto interurbano, debido a las asambleas que los trabajadores realizaban en las terminales.
La medida se inscribe en el conflicto que atraviesa la Seccional Santa Fe de la UTA, que fue intervenida la semana pasada por el Consejo Directivo Nacional, que nombró como interventores a Jorge Kiener y José Luis Arcando.
La UTA nacional suspendió por un lapso prorrogable de 45 días hábiles el mandato y la administración patrimonial de la totalidad de los miembros de la junta ejecutiva de la Seccional Santa Fe, aunque les mantuvo la afiliación.
Kiener y Arcando «tendrán a cargo la realización de un proceso investigativo de carácter contable e institucional», que «deberá ser presentado dentro del plazo máximo de 45 días» ante la conducción nacional del gremio de colectiveros.
Las autoridades que fueron suspendidas rechazaron la intervención y la definieron como «ilegal, ilegítima e infundada».
«La Junta Ejecutiva de UTA Santa Fe, junto al cuerpo de delegados y trabajadores del transporte afiliados a nuestra seccional, rechaza la ilegal, ilegítima e infundada intervención dispuesta por el Consejo Directivo Nacional», indicó un comunicado.
El texto atribuyó además la intervención a una «respuesta al lanzamiento de nuestro conductor Osvaldo Agrafogo como secretario adjunto del Consejo Directivo Nacional para las próximas elecciones en la lista opositora».
