La llegada de las aplicaciones como Rappi, Glovo y Pedidos Ya sigue generando debates, reclamos y conflictos. La precarización laboral a la que son sometidos los que trabajan para algunas de esas empresas
es la punta del iceberg (vale aclarar que Pedidos Ya tiene a sus trabajadores debidamente anotados). Sin embargo hay otros puntos oscuros. Uno de esos puntos es la falta de controles sobre la mercadería transportada y la forma en la que se la transporta. Con ese planteo, el Sindicato Único de Conductores de Motos de la República Argentina ( Sucmra ) presentó un amparo ante la Justicia exigiendo que la Municipalidad de Rosario realice los controles correspondientes sobre el servicio que prestan dichas empresas y que son los que se exigen a la cadetería tradicional.

«No estamos en contra del trabajo, sino de la metodología por la cual se contrata», explicó Gabriel Mainella, uno de los representantes legales de Sucmra. «Y esto hay una triple manera de analizarlo: primero del lado de la precarización laboral, segundo del lado administrativo, que es la falta de controles, que es lo que estamos atacando nosotros. Y tercero, algo que nos atañe a todos, los consumidores. ¿Quién es el responsable cuando, por ejemplo, se entrega comida en mal estado? Puede venir en mal estado desde el comercio, ¿pero quien es el responsable, Glovo, Rappi, Pedidos ya? ¿Quienes se hacen cargo de eso?, enfatizó el letrado.

«Y por último – agregó – lo que vemos en la calle todos los días: gente en una bicicleta, haciendo equilibrio, con el teléfono celular en la mano derecha, manejando con la izquierda y con una caja de elevado peso atrás. Eso es algo que nos atañe a todos».

En ese sentido, el gremio acudió a la Justicia para exigir a la Municipalidad de Rosario igualdad en los controles que realiza. «Pedimos control sanitario por parte de los que transportan mercaderías, el control de tránsito por parte de las personas y el control sanitario en en el transporte fármacos. No es una cuestión laboral la que estamos planteando sino de control sanitario por responsabilidad en el tratamiento de la mercadería», explicaron desde el gremio a Conclusión.

Y detallaron: «El control es municipal, por eso nosotros presentamos el amparo a la Municipalidad de Rosario, para que controle de igual manera a la cadetería tradicional y a la cadetería de las aplicaciones. Lo que no entendemos es por qué se diferencian dos tipos de cadetería si es lo mismo».

En relación a ello, Walter Silva, otro de los letrados que representan al Sucmra, fue categórico: «La ordenanza 7042 es clara en la regulación de nuestra actividad. Entonces nos parece injusto que los que realizamos cadetería tradicional estemos sujetos a los controles que impone esta reglamentación mientras que los trabajadores que lo hacen para estas empresas no estén sometidos al mismo control».

 

Los abogados manifestaron que la reglamentación vigente es muy clara en la forma en que se debe trabajar en este rubro. «La ordenanza dice dos cosas. Por un lado la libreta sanitaria para el que transportar mercadería. ¿Por qué se lo piden a los cadetes tradicionales y no a los cadetes que trabajan para las aplicaciones? No se entiende. Después, responsabilidad del comercio que entrega la mercadería sobre los alimentos. Que haya una responsabilidad en la cadena, desde que das el alimento hasta que llega al consumidor. Eso no corre para las aplicaciones pero sí se exige en la cadetería tradicional».

En esta primera audiencia, que estuvo presidida por el juez Gabriel Abad, estuvieron presentes representantes de las tres aplicaciones, de la Municipalidad de Rosario y del Sucmra.

Gustavo Yedro, secretario general del sindicato de cadetes, destacó que en un principio las empresas de delivery no iban a formar parte de la audiencia y celebró que el juez Abad los haya convocado. «Creo que eso demuestra un interés genuino de parte del magistrado para avanzar en este tema».

Yedro explicó que en esta primera sesión pudieron exponer los reclamos concretos. «Ahora pasamos a cuarto intermedio hasta el 1º de agosto, fecha en la que nos volveremos a encontrar aquí».

Al término del encuentro, los voceros del gremio enfatizaron: «Desde que estas empresas se radicaron en la ciudad de Rosario cada vez son más los trabajadores que, por necesidad recurre a este tipo de trabajo en condiciones infrahumanas. Ustedes los van a ver como andan repartiendo, haciendo malabares, expuestos a cualquier tipo de situación y no hay ningún control de nada, ni del Ministerio de Trabajo, ni de la Municipalidad»,