La sede puntana del Sindicato de Aceiteros (SOIEA) comenzó un paro en la fábrica alimenticia Dánica, en reclamo de una recomposición salarial, e incluso llevó la medida fuera del establecimiento, con cortes en los accesos a la ciudad de Villa Mercedes.

El conflicto gremial mantiene paralizada la fábrica ubicada en esa localidad. En cambio, en la planta que la empresa tiene en Llavallol, en el conurbano bonaerense, hubo acuerdo.

La empresa pertenece al Grupo Beltrán que, además de Dánica, controla frigoríficos en distintos puntos del país.

Según informó la empresa a través de un comunicado, Dánica ofreció para septiembre una recomposición salarial que, sobre la base de los doce meses previos, arroja un incremento de 176%.

En contraposición, en la planta de Dánica en Llavallol, la delegación sindical aceptó la propuesta de incremento salarial. En esta planta ya fue homologado el acuerdo entre el gremio a nivel nacional, la empresa y los delegados de la fábrica bonaerense.

«Desprecian una recomposición salarial del 176% y cortan todos los accesos a la ciudad de Villa Mercedes», señaló la empresa Avex, controlante de Dánica y parte del Grupo Beltrán, a través de un comunicado.

«Cabe destacar que Dánica es una empresa que produce alimentos para abastecer al mercado interno, no elabora productos para exportación, y elabora productos con precios cuidados y accesibles que forman parte de la canasta alimentaria básica», agregaron en el comunicado.

Dijeron que la empresa «ha venido manteniendo su producción a pesar de las dificultades por la falta de insumos importados, que ya venían ocasionando paradas de líneas de producción y los constantes quites de colaboración de los trabajadores en San Luis».

Los antecedentes marcan que, en abril de 2021, un prolongado conflicto entre el Grupo Beltrán y el SOIEA llevó al cierre temporario de la planta de Villa Mercedes, donde trabajan más de 100 operarios que producen aderezos de la marca Dánica.

En aquella oportunidad, tras varios meses de negociaciones infructuosas, Avex había anunciado la decisión, hasta que luego de un mes de negociaciones intervino el ministerio de Trabajo de la Nación y el conflicto se destrabó.