Los trabajadores agrupados en la Asociación del Personal Superior de Empresas de Energía (APSEE) advirtieron que si no tienen una respuesta favorable a sus reclamos realizados en la paritaria del sector el próximo miércoles 3 de abril analizarán y decidirán junto a quien encabeza el gremio, Carlos Minucci, “las medidas conducentes, en defensa del servicio” y de sus representados.

En tal sentido, Minucci acusó al titular de la cartera económica que «está forzando un conflicto con los trabajadores del sector energético».

“En el Sector Eléctrico se produjo el quiebre de la cadena de pagos, esto debido a una decisión que forzó el ministro de Economía Caputo; hecho por el cual las centrales eléctricas, sus trabajadores y trabajadoras fueron afectados por dicha medida al no poder acordar las paritarias correspondientes al mes de marzo por falta de fondos según informan las empresas”, completó.

El Estado Nacional es el encargado de transferirle fondos a la compañía que administra el mercado mayorista eléctrico, para que pudiera cumplir con sus compromisos. Sin embargo, el Ministerio de Economía no está desembolsando un solo peso, lo que derivó en la afectación fundamentalmente a generadores, transportistas y productores de gas natural, combustibles que consumen las centrales térmicas.

Por ello, desde la entidad gremial subrayaron que las empresas eléctricas reclaman los desembolsos con el argumento de que no tienen para pagar los incrementos salariales.

“Ante la falta de acuerdo paritario con los gremios, hemos convocado al Cuerpo de Representantes de las Centrales por nosotros representados y analizado el contexto, con la finalidad de dar margen a las empresas para que les envíen los fondos y así cumplir con el plazo estipulado para acordar Paritaria”, recalcaron.

Enseguida, añadieron que “advirtiendo que este es el inicio de decisiones del Gobierno netamente negativas para el presente y el futuro del sector eléctrico”, acordaron esperar hasta el 3 la respuesta en la reunión paritaria para después seguir el camino anunciado.

También subrayaron que creen “innecesario que el Gobierno haya forzado un quiebre en la cadena de pagos, solo para poder mostrar un asiento contable superavitario afectando a los trabajadores y las trabajadoras”.