En el marco del Día Mundial de la Concientización sobre el Virus de Papiloma Humano (VPH), que se conmemora cada año el 4 de marzo, el Ministerio de Salud y la Agencia de Control del Cáncer, recuerdan que en Santa Fe se incorporó el Test de VPH como estrategia de prevención gratuita y disponible para mujeres entre 30 y 64 años en centros de salud provinciales.

El testeo es un estudio ginecológico que mejora y simplifica la prevención del cáncer de cuello uterino facilitando la detección temprana del virus que lo provoca: el HPV. Se trata de una práctica muy simple e indolora, que se realiza en el mismo momento que el Papanicolaou (PAP) a las mujeres de entre 30 y 64 años, y se suma como estrategia de prevención del cáncer de cuello uterino, parte de los controles ginecológicos de rutina que deben realizarse con regularidad.

La vacuna contra el HPV se indica en niños y niñas a sus 11 años, en dos dosis separadas por seis meses entre una y otra. También deben recibir tres dosis de la vacuna las personas entre 11 y 26 años que vivan con VIH y/o tengan trasplantes.

El Virus del Papiloma Humano (VPH) es un virus de transmisión sexual muy común que no presenta complicaciones en sus formas leves, pero que puede producir distintos tipos de cáncer cuando una infección persistente de sus variantes más severas alcanza a provocar lesiones.

El VPH es el virus responsable del cáncer de cuello de útero, un tipo de cáncer que se ubica como la quinta causa de muerte por cáncer en mujeres de Santa Fe. El virus también puede producir cáncer de ano, pene, vulva, vagina y garganta.

Graciela López de Degani, directora provincial de la Agencia de Control del cáncer destacó la importancia de que la provincia haya sumado como estrategia de prevención de este tipo de cáncer al Test de VPH, un test que está disponible de manera gratuita en centros de salud provinciales para mujeres entre 30 y 64 años.

La funcionaria explicó: “Es importante remarcar que tener VPH no quiere decir que tendrás cáncer, pero si el virus provoca cambios en el cuello del útero hay que descubrirlos y tratarlos”,

Además, recordó la vacunación, que forma parte del calendario de vacunas desde hace años. La vacuna contra el VPH es en definitiva una herramienta indispensable para proteger a las niñas y niños de futuras infecciones en la vida adulta. El VPH es un virus de transmisión sexual para el que existe una vacuna que previene los genotipos más frecuentes que causan más del 90% de las verrugas genitales y el 70% de los cánceres de cuello de útero.

¿Quiénes deben hacerse el Test de VPH?

  • El Test de VPH se recomienda para las mujeres y varones trans que no se hayan realizado una histerectomía total, a partir de los 30 años.
  • No se recomienda su uso en menores de 30 años porque en la gran mayoría de las mujeres jóvenes la infección por VPH se irá sola. Las mujeres y varones trans menores de 30 años pueden realizarse el PAP.
  • El Test no se recomienda para mujeres embarazadas. Las mujeres embarazadas se pueden realizar el PAP, si fuera necesario.

¿Cómo se realiza?

  • Se introduce un pequeño aparato llamado especulo en la vagina
  • Se realiza la toma de muestra doble (PAP y Test de VPH)
  • La muestra se envía en un tubito con un medio líquido para ser analizada en el laboratorio de VPH por un procesador automático. Esta muestra se envía junto con el vidrio del PAP, que sólo se leerá si el Test de VPH es positivo.

¿Cuál es el vínculo entre el VPH y el cáncer de cuello de útero?

  • Para que se desarrolle el cáncer de cuello de útero debe existir una infección que persista en el tiempo por alguno de los tipos de VPH de alto riesgo.

¿Todos los VPH pueden causar cáncer de cuello de útero?

  • No todos los VPH están relacionados con el cáncer. Los VPH se dividen en dos grupos:
  • Los VPH «de bajo riesgo», que pueden provocar cambios celulares benignos (lesiones) o verrugas genitales. Este tipo de lesiones no se relacionan con el cáncer.
  • Los VPH de «alto riesgo» se relacionan a las lesiones precancerosas. Este tipo de lesiones, si no se tratan, pueden evolucionar lentamente a un cáncer.