Por Jennifer Hartkopf
Desde hace unos pocos años, el mundo táctil o touch comenzó a ingresar a los hogares argentinos de la mano de los más novedosos teléfonos móviles o dispositivos similares; y a instalarse así en el mundo de los más chicos. Ya sea por el afán del juego, por curiosidad o hasta porque algún papá fanático considera regalarles el propio, es que los pequeños que hoy están en los jardines tuvieron acceso a estos elementos.
Por eso que los más pequeños se manejen como pez en el agua con tablets, celulares y computadoras ya no es novedad. Sin embargo, no deja de ser un fenómeno que posibilita infinidad de interrogantes: ¿Qué impacto genera el contacto temprano con las TICs en los procesos cognitivos de los niños o en otras áreas del desarrollo infantil? ¿Cuáles son sus potencialidades? ¿Y sus limitaciones? ¿Cómo inciden las herramientas informáticas en la llegada del conocimiento? ¿Cómo se transforma la relación maestra-niño en relación al uso de las tecnologías? ¿Es necesaria su incorporación desde edades tan tempranas? Sólo por mencionar unas pocas…
Ese amplio y diverso universo tecnológico, así como sus miles de interrogantes, enmarca múltiples proyectos, planes, experiencias y enseñanzas que buscan adaptarse, relacionarse, dar respuestas y experimentar la era digital; un mundo que todavía arroja mucho por descubrir, constantes modificaciones y profundos cambios.
En ese contexto, el gobierno de Santa Fe implementará “Tramas Digitales”. Esta decisión, implica incorporar tablets a las salas de 150 jardines de infantes de aquellos barrios donde se lleva adelante el Plan Abre (Santa Fe, Rosario, Villa Gobernador Gálvez, Santo Tomé y Pérez) a los fines de generar una política de inclusión digital desde el nivel inicial; en tanto chicos de 4 y 5 años tendrán la oportunidad de aprender a través del uso de estas tecnologías de la información.
La iniciativa contempla equipamiento –recibirán un kit de 10 tablets por jardín, una netbook y una pantalla digital interactiva–, conectividad a Internet y formación docente. La clave del proyecto, según informaron desde el gobierno provincial, está en que las tecnologías llegan al aula de la mano de una formación permanente para los docentes, para que los kits digitales puedan ser incorporados naturalmente a las clases, con estrategia pedagógica.
“Uno tiene que adecuarse a los nuevos tiempos, pero sin dejar de enfocarse en el acto humano, en el binomio educador-educando. Por eso, Tramas Digitales incluye la capacitación docente. El compromiso que tienen los maestros nos llena de alegría y ha sido la clave para que estemos entre las provincias con mayor calidad educativa”, dijo el gobernador Antonio Bonfatti.
Por su parte, la ministra de Educación, Claudia Balagué, señaló que “el valor de Tramas Digitales es que fomenta la alfabetización digital en todos los niveles y modalidades del sistema educativo”.
“Nos esforzamos para que las mejores tecnologías lleguen a las escuelas que más lo necesitan, pero para lograr la equidad educativa sabemos que lo esencial es que los maestros se sientan seguros de cómo utilizarlas en las clases. Y ahí estamos, con un plan de formación permanente, para acompañar una verdadera inclusión digital”, agregó la ministra.
En 2014, fueron 10 los jardines que ya recibieron kits digitales, y comenzaron experiencias con tablets en las salas. Laura es docente del Jardín de Infantes N° 310 de Villa Gobernador Gálvez y dice que son muchos los proyectos del aula en los que ya pudo incorporar esta herramientas. “En ningún momento dejan de jugar, el dispositivo ayuda a los chicos a desplazarse por toda la sala, interactuando con los compañeros”, contó y destacó: “Entre ellos colaboran; mientras uno sostiene la tablet, el otro acciona y aprende la distribución de tareas y el trabajo colaborativo”.
Para abarcar distintas miradas sobre el tema, Conclusión consultó a otros profesionales y especialistas con experiencia en educación infantil de más de 25 años. Si bien coincidieron en la necesidad de adaptarse a los tiempos que corren, caracterizados por la presencia global de la tecnología, aportaron algunos reparos y otras consideraciones al hecho de incorporar las TICs desde tan temprana edad en los jardines de infantes.
“En la medida que la tecnología se adquiera y se utilice como algo más, como complemento, me parece bien porque la tecnología ganó un lugar preponderante en el mundo de los chicos, nos guste o no nos guste”, expresó Graciela Spooner, directora del Jardín Materno Infantil Osecac Rosario.
Cuando se le pidió haga un análisis del tema señaló que “mientras se trate de una dosis tecnológica bajo supervisión de un adulto, sean padres o docentes, medida y controlada, su implementación es válida. El problema –prosiguió– es que generalmente, por comodidad de los padres, se pasa esa barrera y la tecnología los invade”.
Entonces agregó: “Los chicos, últimamente, se abocan más de lo que se debería a lo tecnológico. Porque el chico tiene una edad, como todos, para cada cosa y en la infancia tiene que predominar el juego. Pero el juego –aclaró– que está dado por su interacción con el aire libre, con los animales, con sus juguetes tradicionales, con sus amigos, y no por su relación con una computadora, que muchas veces lo aísla; ese no es el tiempo de la infancia”, remató Spooner.
También dijo que no es que el niño elija y prefiera juguetes informáticos por sobre los tradicionales, sino que es lo que lo rodea y acostumbra: “El chico cuando tiene el encuentro con otro tipo de materiales, responde espontáneamente y disfruta. Lo que pasa es que no lo tiene, ahora lo que está masificado y lo que lo aborda es todo lo tecnológico; y los padres, por comodidad, le proporcionan ese tipo de juguetes entonces el niño se alimenta de eso. Los adultos le dan ese ejemplo –añadió– y así, olvidan lo que es ser en relación con el otro”.
Por último, reflexionó y dijo que “en este momento creo que lo que el jardín tiene que brindarle a los niños es precisamente aquello de lo que ahora se carece, que es el juego tradicional, que es el juego con el otro, con la naturaleza, el juego en sí mismo. La computadora ya la saben manejar, lo que no saben manejar es un libro. Creo que no hay que perder eso. Se puede complementar, pero no perderse”, finalizó la directora.
En tanto, Fabiana Pessi, psicóloga y maestra jardinera, señaló a Conclusión que el tema propone una doble interpretación: “Hay dos corrientes, por un lado la tecnología que avanza y el que se queda afuera se pierde el presente, el mañana y es cierto que los chicos manejan cada vez más temprano todos los elementos tecnológicos, y es parte de la generación, y es una adquisición generacional. Pero por otro lado, –continuó– están todos los conceptos psicológicos en los que la incorporación del conocimiento, el conocimiento del mundo por parte del niño, se hace a través de la experiencia directa, las pruebas de ensayo y error, los contactos que el niño tiene con los objetos que lo rodean, el mundo de los objetos, como se llama a nivel psicológico”, detalló.
“Todo lo que la tecnología le va a brindar al niño es, la mayoría de las veces, estático. Es decir, hay una propuesta de parte de la máquina y lo máximo que hace el niño es optar entre diferentes posibilidades y elegir una”, señaló la psicóloga.
En cuanto a las posibilidades que brindan las tecnologías, expresó que “sé que hay videos, música, jueguitos, películas y esas son estrategias pedagógicas que se utilizan para llamar la atención, incorporar conocimientos; pero siempre me parece que acá corremos los riesgos sobre quién va a implementar esto, quién va a controlar estos usos”.
En ese sentido, Pessi utilizó el televisor como ejemplificación y dijo que “cuando apareció en muchos casos era un elemento de distracción, que unía a la familia, pero terminó siendo, en muchos otros, un elemento de discordia, que terminó con el diálogo y con las reuniones familiares, o sea por el mal uso que se le da”. Y agregó: “Esta propuesta que se hace a través de la pantalla, termina absorbiendo el interés, el tiempo, la capacidad de comunicación y termina ocasionando, generalmente malas experiencias. No por nada dicen que el televisor es la niñera más barata que tienen los padres”.
Resumiendo y ya cerrando, Pessi remarcó que “la informatización del aula a esta edad me parece excesiva y creo que el docente tiene un montón de otros recursos antes que una Tablet o una computadora. La experiencia directa es insustituible, es lo que realmente enriquece y construye. Está bien abrirse al futuro –admitió– pero hay que tener cuidado con las despersonalización de los vínculos y entender que la educación tiene que estar guiada y mediada por personas, por lo humano. El rol del docente no puede ser ocupado por una máquina”, finalizó la profesional.
Las TICs existen y son parte de nuestro mundo. Lo importante es encontrar un punto intermedio entre sus fortalezas y debilidades para hacer de ellas un uso adecuado, sin caer en un fanatismo extremo que muchas veces nos distancia del vínculo humano.
