Por Abigail Ganopol

El feminismo no es solo un tema de mujeres para mujeres. Sin embargo, no existe en general un entendimiento profundo de lo que significa el feminismo y por este motivo gran cantidad de gente automáticamente lo encuadra en las antípodas del machismo. Sin pretender ser exhaustivo, este artículo busca presentar algunos aspectos que permitan aportar claridad a la temática del movimiento feminista.

Qué NO es el feminismo

En el cortometraje francés de Éléonore Pourriat, “Majorité Opprimée” (Mayoría oprimida), la directora propone un universo distópico en el cual se plantea el intercambio de roles sociales entre hombres y mujeres. En este contexto, la mujer es mujer-proveedora, mujer-acosadora y el hombre pasa a ser cosificado, abusado sexualmente, relegado exclusivamente a tareas de cuidado hogareñas, o bien ocupando posiciones laborales de baja responsabilidad en las cuales se muestra además cómo el entorno laboral de mayor jerarquía (femenino en este caso) hace comentarios sexistas que minan su autoestima. Este corto permite visibilizar las situaciones cotidianas de machismos y micromachismos a las que las mujeres nos vemos típicamente expuestas, planteando cómo se ve el escenario desde la vereda de enfrente. El objetivo es que el contraste del intercambio de roles sacuda a la sociedad mostrando crudamente las situaciones habituales que las mujeres vivimos a diario en los distintos ámbitos.

Foto: roles sociales invertidos en el universo planteado por Éléonore Pourriat en su corto “Majorité opprimée”.

Sin embargo, hacia el final del cortometraje, el protagonista masculino dice estar “harto de esta sociedad feminista de mierda”, lo cual pareciera poner erróneamente al feminismo como antítesis del machismo, cuando esto categóricamente no es así.

El feminismo no busca generar un mundo misándrico, agresivo, apodado por algunas personas como “feminazi”. El feminismo no busca el sometimiento, desprecio u odio de los hombres por parte de las mujeres.

Entonces: qué es el feminismo y qué nos permite como sociedad

 Mientras que el machismo es un conjunto de prácticas, creencias y actitudes que ponen al hombre como ser superior respecto a otros géneros, el feminismo es un movimiento que postula la igualdad de derechos y oportunidades sin distinción de género y libre de opresión. Y vale decir que dicha equidad de género también beneficia a los hombres.

Como en Argentina no hay leyes o códigos visibles que limiten expresamente a las mujeres ni a otros géneros no binarios, hay una corriente de pensamiento que postula que todas las personas tenemos iguales derechos y por lo tanto minimizan los reclamos del movimiento feminista como innecesarios y sin sentido.

Pero luego está la realidad del día a día que vivimos como sociedad y es entonces cuando este argumento basado en las leyes parte de una base errada. Si bien las leyes dan un marco, existen construcciones sociales mucho más arraigadas y naturalizadas que hacen que en los hechos personas de distintos géneros tengamos grandes diferencias en el acceso a oportunidades de desarrollo personal y calidad de vida. Por mencionar solo algunos ejemplos, y sin hacer una lista exhaustiva:

  • “Juguetes para nena” y “juguetes para nene”. Existen desde la más tierna infancia (desde el nacimiento incluso), condicionamientos sociales que hacen que niñas y niños tengan distinto grado de exposición según su género. Entonces, a las nenas en general nos regalan mayormente bebotes que nos preparan para maternar, cocinitas que nos preparan para ocuparnos del hogar y muñecas sexies y maquillaje para aprender a estar diosas para nuestros maridos. Mientras tanto, a los nenes les regalan juegos que incentivan el descubrimiento, la investigación, la motricidad, la creatividad. Entendiendo que los juegos de la infancia nos preparan para las elecciones de vida en la etapa adulta, es fácil comprender por qué todavía tenemos mayoría de hombres en carreras científico-tecnológicas y por qué tenemos mayoría de mujeres en tareas y trabajos asociados al cuidado. Y asimismo, también es fácil comprender por qué existen diferencias en las posibilidades de desarrollo profesional. Las mujeres no hemos sido expuestas a la misma cantidad y calidad de oportunidades que los hombres desde temprana edad.

Foto: Lo que muestra Google cuando se busca “Juguetes de nena Argentina”.

Foto: lo que muestra Google cuando se busca “Juguetes de varón Argentina”

 

  • Techo de cristal y suelo pegajoso. El techo de cristal consiste en una limitación invisible que impide a mujeres y personas no binarias ascender laboralmente. Se trata de una cuestión coyuntural. No hay leyes o reglas que establezcan expresamente el no acceso de mujeres y personas no binarias a puestos jerárquicos, pero sí existen construcciones sociales enraizadas históricamente que hacen que esto ocurra y que son difíciles de detectar y, por ende combatir. El suelo pegajoso por su parte hace referencia a la dificultad para las mujeres de realizarse profesionalmente por verse todavía ancladas a su rol histórico de cuidadoras: esposas, madres, amas de casa. Y ojo: esta también es una construcción social y no una dificultad particular y aislada de cada mujer. Es lo que la sociedad espera tácitamente de las mujeres en general. A pesar de que esto está comenzando a cambiar, y las tareas del hogar están un poco mejor repartidas en la actualidad, la sobrecarga mental sigue siendo de la mujer, que además de trabajar afuera tiene que ser “housekeeping manager”

Foto: Mafalda 05 – 048: El suelo pegajoso – Salir del espacio tradicionalmente asignado a las mujeres constituye un obstáculo en su desarrollo profesional.

 

Licencias por crianza desiguales para personas que maternan y que paternan.

En Argentina mientras que las personas gestantes tenemos 90 días de licencia (a repartir antes y después de la fecha probable de parto), las personas que paternan tan solo tienen unos pocos días. Esta diferencia de tiempos atenta contra la conformación de los vínculos y la dinámica y necesidades de la nueva familia. Estos tiempos también atentan contra el bienestar del binomio madre-bebé. En efecto, el período mínimo de lactancia establecido por la Organización Mundial de la Salud es de 6 meses. Si la licencia por maternidad es menor a este lapso, esto pone a quien materna en situación de elegir entre cuidar a su bebé utilizando lo que se conoce como excedencia (prolongación de la licencia por maternidad SIN goce de sueldo) o bien, reintegrarse a su trabajo afectando el vínculo con su bebé. Si en cambio todos los trabajos contaran con guarderías, esto facilitaría la reincorporación de la mamá a su ámbito laboral. Este es tan solo un ejemplo en el cual las diferencias inherentes entre los géneros dejan en claro que no basta con igualdad de oportunidades.

Sobre la importancia del feminismo

De lo anterior es claro que el feminismo no es cosa de mujeres sino de toda la sociedad.

El feminismo permite que las mujeres podamos vivir en una sociedad libre de violencia de género; que podamos circular por la calle a cualquier hora, vestidas como queramos; que podamos decidir qué hacer con nuestros cuerpos y nuestra sexualidad; que no tengamos que elegir entre ser mamás y ser profesionales; que podamos acceder a las mismas posibilidades de desarrollo que los hombres en todas las áreas de la vida.

Foto: diferencia entre igualdad y equidad. Copyright: Coomeva

El feminismo les brinda esas mismas oportunidades a los hombres, quienes también se ven sujetos a estereotipos de género.  Por ejemplo, en una sociedad feminista no existen colores ni juguetes de nena y de nene; un nene puede jugar al papá con un bebote; un hombre puede quedarse en su casa cuidando a su bebé y realizando las tareas del hogar mientras su compañera sale a trabajar afuera; un varón puede llorar sin ser caracterizado ofensivamente con un término sexista.

En una sociedad feminista todas las personas pueden vivir y desarrollarse libremente sin importar su género. 

¿El fin del feminismo?

El movimiento feminista quedará obsoleto cuando logremos constituir una sociedad madura, empática, respetuosa donde exista igualdad efectiva de oportunidades sin distinción de género. Hasta ese entonces, deberíamos luchar por lograr que cada vez más personas se consideren a sí mismas como feministas.

Siempre es tiempo de volver a empezar.

Siempre es tiempo del tiempo.

*Biografía Abigail Ganopol

Tengo un doctorado en Ciencias Físicas por la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires.
Trabajo en la industria aeroespacial desde el año 2009, siendo mi campo de expertise el management de Operaciones de Misiones Satelitales. Trabajé en varios proyectos espaciales de larga duración en los que tuve a cargo equipos numerosos, cumpliendo
objetivos exigentes, con plazos de entrega estrictos y revisiones de proyecto internacionales periódicas. He sido distinguida por la NASA
por mi trabajo en una de las misiones en las que trabajé. Como manager uno de mis mayores intereses fue mejorar la performance de nuestro equipo por lo cual consagré varios años a desarrollar e implementar un método de Gestión de Conocimiento cuyo foco es el
proceso de Lecciones Aprendidas. He sido nombrada mentora 2023 del programa Space4Women de la United Nations Office for Outer Space Affairs. Tengo 15 años de experiencia en docencia universitaria, tanto en carreras de grado como deposgrado. He dirigido y he sido miembro del tribunal revisor de tesis de maestría en el área aeroespacial. Mi naturaleza curiosa e inquieta me ha llevado a formarme además en temas afines al desarrollo
personal. En 2018 fundé NUT Gestión del Tiempo con el fin de mejorar la calidad de vida de las personasmediante la enseñanza de la optimización del tiempo. En mis capacitaciones y consultorías aplico todo lo que aprendí en mis años de management de operaciones espaciales, sumando a esto una mirada humanaque permita delinear objetivos, planificar y ejecutar de manera realista y centrada en el bienestar. Soy autora del libro “Es Tiempo del Tiempo” publicado en 2019.

Abigail Ganopol, PhD
@nut.gestiondeltiempo
NUT Gestión del Tiempo

Acerca de NUT Gestión del Tiempo 
Visión: Con NUT Gestión del Tiempo mi objetivo es aportar a la construcción de una sociedad sana tomando como punto de partida el mejorar la calidad de vida de las personas, logrando que personas que se sienten en un estado de propósito experimenten una vida plena y creen a su vez un mundo mejor.
Misión: Guiar a las personas en la identificación de objetivos, la priorización de los mismos y el diseño de un plan de acción para concretarlos, partiendo desde el lugar en el cual cada individuo se encuentra hoy y construyendo el camino que le permita llegar a donde desea estar teniendo presente que tanto o más importante que el logro de objetivos es disfrutar el camino recorrido.