Luis Alberto Escobedo, quien además de combatir contra las fuerzas inglesas con 19 años fue futbolista profesional, integrando equipos de Primera División y el ascenso como Vélez, Belgrano de Córdoba y Colón, viajó por tercera vez a Malvinas para rendirle homenaje a sus compañeros caídos en batalla junto a otros siete ex combatientes, cuando pasó el terrible momento.
En una entrevista con Clarín, Escobedo contó: “El martes pasado fuimos al Cementerio de Darwin, que está en una zona inhóspita y desértica, a unos 60 km de la ciudad. Hicimos un minuto de silencio y después cantamos el Himno argentino y lanzamos frases como ¡Viva la Patria!… Además, exhibí una bandera que llevo siempre con la imagen de las Islas y la frase Territorio Argentino. En ese momento estaba en el cementerio un periodista austríaco que había llegado en un auto manejado por un kelper, que nos miraba atentamente”.
Un día más tarde, cuando todos se encontraban durmiendo, recibieron la visita sorpresiva de la policía, que comenzó a quitarles sus pasaportes, celulares, cámaras de foto, ropa e ítems personales, para luego llevarlos detenidos, situación en la que estuvieron dos días.
“Nos trataron como si fuésemos delincuentes. Nos tomaron las impresiones digitales y nos sacaron fotos de frente y de perfil. Todo porque el chofer kelper nos había denunciado por ‘ofensas e insultos’. Pero nada que ver, solamente honramos la memoria de los nuestros sin ofender a nadie”, expresó en aquella charla Escobedo.
“Despues de declarar durante esos dos días, y con la incertidumbre de que podíamos seguir presos más tiempo, nos absolvieron. El juez desechó la denuncia, pero vivimos una situación muy tensa”, contó.
Finalmente, Escobedo, quien integra la Selección Argentina de mayores de 50 años, pudo recuperar su bandera tras una discusión con los militares ingleses, que según sus palabras fueron comprensivos, no así los kelpers.
