Por Alejandro Maidana

Un basural a cielo abierto, polvillo en suspensión originado por la carga y descarga de cereales en el ejido urbano, los casos de cáncer que superan la media de lo normal, son solo algunos de los disparadores que empujaron a los pobladores de Suardi a presionar para lograr una ordenanza que les devuelva la calidad de vida cercenada.

Distante a poco más de 350 km de la ciudad de Rosario, este pueblo devenido en ciudad, pero con la idiosincrasia del primero, no le escapa a la espinosa realidad que atraviesa a la enorme mayoría de territorios acorralados por este nocivo modelo de producción.

La utopía de encontrar respuestas concretas por parte del Estado y la justicia, empuja en muchas oportunidades no solo al descontento, sino también a la claudicación de una estoica y valerosa lucha. Pero este no es el caso de Suardi, la resiliencia de los Vecinos Autoconvocados, desembocó en la presentación al Concejo Deliberante de una nota de Comisión para limitar fumigaciones en su amplio espectro.

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“Pedimos 1000 metros cómo <franja de resguardo y protección ambiental>, con la idea que a  futuro ese espacio sea utilizado para implementar la cosecha agroecologia. Esta nota se realizó en base a un modelo de ordenanza que fue cedida por los vecinos autoconvocados de Hersilia, que fue prolijamente modificada para adaptarla a la situación de Suardi”, sostuvo Milagros Moreyra, vecina y referente de la lucha ambiental del lugar en charla con Conclusión.

Cabe destacar que participaron de la confección de dicho pedido, personas como Fernando Albrecht y Eduardo Rossi, personas con una trayectoria intachable en lo que a delitos ambientales se refiere. La comuna de Hersilia tiene aprobado esta planificación y reordenamiento productivo desde el 2011, un verdadero ejemplo, un modelo a imitar.

Eliana es mamá de 2 nenas de 2 y 5 años, alertada por la lúgubre realidad que abraza a su ciudad, decidió interiorizarse sobre la problemática y acoplarse a los reclamos. “Me sume al grupo para interiorizarme y formar parte de esta lucha por la salud futura de mis nenas, vecinos y personas allegadas a mí. Todos estamos expuestos diariamente al polvillo que emana la cerealera, sumado al humo del basural a cielo abierto, sin dudas esto puso en jaque la salud de Suardi. Los casos de enfermedades provocadas por los agrotóxicos están a la vista”, sostuvo.

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“Desde nuestro humilde lugar hemos presentado esta nota en donde pedimos que no nos sigan exponiendo a estas prácticas, reinstalando los silos y almacenamiento de químicos lejos de la población. Que las fumigaciones aéreas se alejen a tres mil metros de la ciudad, y las terrestres a mil, que prohíban y multen las fumigaciones en el área urbana, entre otros. Exigimos que se respete nuestro derecho a la salud, esperamos una pronta respuesta, necesitamos ser escuchados y quienes tienen el poder involucrarse, que actúen con hechos y dejen de lado las promesas”, enfatizó.

Un paso adelante que busca frenar la desidia, “hicimos la entrega de lo que buscará ser a futuro un proyecto de ordenanza en la mesa de entrada del Concejo. El fin último es lograr delimitar las aspersiones tanto aéreas como terrestres, prohibir la circulación de mosquitos fumigadores, etc. Éste proyecto es uno de tantos otros trabajos que los vecinos autoconvocados de Suardi venimos haciendo en alianza con otros vecinos de Ceres, Hersilia y Arrufo”, comentó Milagros Moreyra.

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La problemática se va expandiendo, el combo de contaminación que existe en Suardi  por el uso y abuso de agrotoxicos, es más que explícito. “Los casos de cáncer son tan alarmantes como el número de fallecidos por esta cruel enfermedad. A esto habría que sumarle las decenas de enfermedades relacionadas a esta contaminación, corroboradas por el doctor Medardo Ávila. En el proyecto también dejamos un link para que el Concejo y el Ejecutivo puedan visitar <la antología toxicologica del glifosato>, cómo también hacemos mención de las demandas y los juicios contra de Monsanto por ser promotor del cáncer».

Por último, la incansable vecina que no ha cedido un metro en su justo reclamo, espetó: “Creemos que el Estado debe posicionarse siempre a favor del ciudadano y dejar de lado la codicia de los agronazis. Pero es preciso reiterar una y otra vez esto, que con un Intendente productor y dueño de una empresa fumigadora, es difícil esperarse otra cosa. Tenemos esperanza que el Concejo se apiade, según ellos están a favor de nuestros reclamos, solo resta esperar si son condescendientes con los hechos”.