Una persona murió y 11 resultaron heridas a raíz de una explosión ocurrida esta noche en el centro de la pequeña ciudad Ansbach, en Baviera, en el sudeste de Alemania, y autoridades locales y regionales aseguraron que fue un hecho intencional.

Fue “una explosión provocada deliberadamente” y podría tratarse de un atentado, dijo un vocero del Ministerio del Interior de Baviera a la agencia DPA.

Fuentes policiales y del Ministerio del Interior bávaro dijeron que había sospechas de que el muerto fuera el autor del atentado.

Poco antes, la alcaldesa de Ansbach, Carda Seidel, había descartado una explosión accidental por fuga de gas, como habían reportado inicialmente medios locales, y aseguró que se trató de un hecho premeditado, informó el sitio web NordBayern y reprodujo la agencia Europa Press.

La detonación ocurrió alrededor de las 22 (las 17 en la Argentina) a la entrada de un concierto al aire libre al que asistían unas 2.500 personas.

Algunos testigos refirieron una sola detonación y otros dijeron que escucharon dos.

El centro de la ciudad -cercana a Nüremberg- fue cerrado completamente y los residentes no podían regresar a sus hogares.

Policías, bomberos y socorristas acudieron al lugar, frente al castillo de Ansbacher, y un helicóptero sobrevolaba la zona, mientras el concierto fue cancelado y los asistentes abandonaron el sitio.

Varias viviendas y un hotel en las inmediaciones del lugar de la explosión fueron evacuados.

Paralelamente, diversas autoridades se habían constituido en un gabinete de crisis al cual iba a sumarse el ministro del Interior de Baviera, Joachim Herrmann, quien se encontraba en Berlín y anunció su viaje inminente a Ansbach.

Hoy, más temprano, un ciudadano sirio de 21 años, armado con un machete, asesinó a una mujer e hirió a otras cinco personas en Reutlingen, en el estado Baden-Wurtemberg, limítrofe con Baviera.

El viernes, un estudiante germano-israelí asesinó a tiros a nueve personas y luego se suicidó en Munich, también en Baviera.

Y el lunes pasado, un refugiado afgano de 17 años dejó cinco heridos graves al atacar a pasajeros de un tren con un hacha y un cuchillo.

Foto: El País