Nicolás Rodríguez Bautista, alias Gabino, el líder del ELN, la segunda guerrilla de Colombia, consideró hoy que poner «condicionantes» como la liberación de rehenes para iniciar la fase pública de negociaciones, como exigió días atrás el presidente colombiano Juan Manuel Santos, supone «ir contra el proceso de paz».

«Cada una de las partes tenemos muchos motivos para poner condicionantes, pero hacerlo es ir contra del proceso de paz esperamos que el Gobierno entienda que eso sólo produce trancas en el proceso y que si nos pusimos de acuerdo en una agenda, lo sensato es asumirla», señaló el guerrillero en una entrevista realizada por el diario español Gara, citó la agencia EFE.

El líder del Ejército de Liberación Nacional (ELN) asegura que su objetivo es «que llegue la paz» y se pregunta qué pasaría si la guerrilla pusiera como condición para continuar con el diálogo la liberación de guerrilleros, que están encarcelados «en condiciones infrahumanas y muriendo por falta de atención médica.

El 30 de marzo, el Gobierno y el ELN anunciaron en Caracas un acuerdo para iniciar la fase pública de los diálogos de paz, que tendrán mesas de trabajo en Ecuador, Venezuela, Chile, Brasil y Cuba.

Según sus declaraciones, el anuncio de las negociaciones fue vivido con «mucha alegría» por el ELN ya que fue ver cómo «muchos esfuerzos» se hacían realidad.

El hecho de que tenga sedes en cinco países es un «asunto práctico», ya que todos los países elegidos como sede han jugado «un importante papel» en los dos años de «diálogo discreto» que se han mantenido.

Respecto del rechazo por parte del ex presidente Álvaro Uribe al proceso de paz, el líder del ELN asegura aspirar a que la mayoría de la sociedad «se vincule al proceso», ya que solo el «pueblo movilizado» logrará la paz, con el apoyo de la comunidad internacional.

Gabino apuesta, en línea con las FARC, por refrendar los acuerdos de paz en una Asamblea Constituyente, aunque con matices: «Hemos planteado que se requiere un proceso constituyente, pero tal refrendación de los acuerdos debe pasar por lo que las mayorías consideren; que se haga su voluntad es lo que ratificamos y nosotros nos sumamos a ello».

Tras la declaración, la Defensoría del Pueblo de Colombia calificó de «desafortunado» el rechazo de Gabino a liberar a los civiles que mantiene secuestrados como paso previo para iniciar las negociaciones de paz.

La Defensoría consideró en un comunicado que «una cosa es negociar en medio del conflicto» y «otra es desconocer los principios del Derecho Internacional Humanitario», en alusión a las recientes declaraciones de Gabino. La Defensoría respaldó la postura del Gobierno y recordó al ELN que muchas de sus acciones «involucran directamente a la población civil, que nada tiene que ver en la confrontación».

En este sentido recordó el caso del político Patrocinio Sánchez Montes de Oca, al que después de tres años de secuestro el ELN canjeó por su hermano Odin el 3 de abril, o un reciente atentado contra la infraestructura petrolera en el departamento de Arauca (este), donde fuentes de agua resultaron contaminadas.

«Si a lo anterior se añaden circunstancias como las presiones ejercidas por el ELN para el reclutamiento de menores de edad en el sur del departamento de Bolívar, denunciado por la Defensoría del Pueblo, claramente se concluye que lo sensato es excluir a la población civil del conflicto y a partir de allí avanzar conforme lo acordado entre las partes hacia una solución negociada», agrega la Defensoría.