Más de 30.000 policías colombianos custodiarán la visita que el papa Francisco hará a Bogotá, Medellín, Villavicencio y Cartagena de Indias entre el 6 y el 10 de septiembre.

La Iglesia colombiana ha dicho que la «reconciliación entre los colombianos» luego del conflicto armado de más de medio siglo con las Farc y la «defensa de los derechos humanos» serán dos de los ejes que abordará el pontífice argentino durante la visita de cinco días que hará al país sudamericano.

Solo en Bogotá habrá 14.411 policías, además de 3.600 militares del Ejército que velarán por la seguridad y la convivencia en los sitios escogidos para los trayectos y actividades del Papa, dijo la policía en un comunicado.

Las autoridades diseñaron cuatro Puestos de Mando Unificado (PMU) que estarán integrados por delegados del Gobierno, las Fuerzas Militares, la Policía, la Defensoría del Pueblo, alcaldías y entidades locales.

Villavicencio, Medellín y Cartagena también contarán con esos puestos de mando mientras el papa argentino permanezca en esas ciudades. Además, en Villavicencio el dispositivo contará con 5.479 miembros de la policía, Medellín con 6.193 y Cartagena con 4.259, por lo que el total será de 30.342 agentes en todo el país.

La policía recordó que se estima que en todo el país unas 4,5 millones de personas tengan contacto en algún momento con el papa Francisco, bien sea durante las actividades públicas o sobre los 135 kilómetros destinados para los desplazamientos terrestres.

Con el lema «Demos el primer paso» en la superación del conflicto entre el Estado y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) culminado con los acuerdos de noviembre de 2016, el Pontífice llegará a Bogotá el miércoles 6 y al día siguiente se reunirá con el presidente Juan Manuel Santos. Luego irá a Medellín, donde oficiará una misa en el aeropuerto el viernes 9.

En Villavicencio, Francisco dará el mensaje más importante de su viaje, cuyo eje estará puesto en «la reconciliación en Dios, con los colombianos y con la naturaleza» e incluirá una «oración por la reconciliación nacional», dijo la Conferencia Episcopal Colombiana.

El último día, en Cartagena, estará dedicado a «la defensa de los derechos humanos».