Las tropas israelíes y los combatientes del movimiento islamista palestino Hamas continúan hoy sus intensos combates en las principales ciudades de la Franja de Gaza, especialmente en el sur, adonde se expandió la operación terrestre israelí a una semana del fin de la tregua y más de dos meses de guerra.

Después de una primera fase de ofensiva centrada en el norte del enclave, el Ejército israelí expandió sus operaciones hasta el sur, donde se refugian casi dos millones de civiles desplazados, atrapados en un territorio cada vez más exiguo.

Los soldados israelíes combaten contra los milicianos islamistas en Khan Yunis, la ciudad más importante del sur de la Franja, pero también en el norte, en la ciudad de Gaza y en el sector vecino de Jabaliya.

En una llamada ayer con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, «insistió en la necesidad absoluta de proteger a los civiles y diferenciar a la población civil de Hamás», dijo la Casa Blanca.

Washington apoya firmemente a Israel, pero se inquieta cada vez más por el balance de víctimas civiles en Gaza.

El balance de la ofensiva israelí llegó a 17.177 muertos, un 70% de ellos mujeres y menores de 18 años, según el Ministerio de Salud de Hamas que gobierna la Franja de Gaza.

Israel prometió desmantelar a Hamas por sus ataques del 7 de octubre, que dejaron 1.200 muertos, en su mayoría civiles, y liberar a decenas de rehenes que el grupo se llevó a Gaza, incluyendo a una veintena de argentinos.

Ayer por la noche, las televisiones israelíes emitieron videos de decenas de palestinos en paños menores y con los ojos vendados custodiados por soldados en la Franja de Gaza, unas imágenes que provocaron controversia en redes sociales.

El ejército israelí dijo «investigar» para «verificar quién está vinculado a Hamas y quién no», consignó la agencia de noticias AFP.

Traumatizado por el ataque del 7 de octubre y en medio de las hostilidades de la guerra, Israel comenzó a celebrar el jueves la fiesta judía del Janucá.

En Tel Aviv, familias y amigos de los rehenes tomados por Hamas alumbraron velas en un candelabro gigante con 138 brazos en recuerdo del número de personas todavía cautivas en Gaza tras la liberación de 80 de ellos durante una tregua en la última semana de noviembre.

Además de los bombardeos y la operación terrestre, Israel impone desde el 9 de octubre un asedio total en la Franja de Gaza, que provoca grave escasez de agua, comida, medicamentos y electricidad.

«El orden civil se está desmoronando en Gaza: las calles parecen salvajes, sobre todo al anochecer, algunos convoyes de ayuda están siendo saqueados y vehículos de la ONU apedreados. La sociedad está al borde del colapso total», alertó hoy el director de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa) en la red social X.

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que el sistema de salud está «de rodillas» en Gaza, con la mayoría de hospitales del norte inoperativos y los del sur desbordados con miles de heridos que atender.

El combustible, necesario para el funcionamiento de los generadores de los hospitales y de los equipos de desalinización del agua, también es escaso.

El gobierno israelí autorizó esta semana la entrega de un «suplemento mínimo» de combustible para evitar un «colapso humanitario» y epidemias en la Franja de Gaza.

Según la ONU, 1,9 millones de personas (un 80% de la población de Gaza) se vieron desplazadas por la guerra, que ha destruido o dañado más de la mitad de las casas del territorio.

En Cisjordania, un territorio palestino ocupado por Israel desde 1967, la Autoridad Nacional Palestina indicó hoy que las fuerzas israelíes mataron a tiros a seis palestinos en un campo de refugiados.

El ejército israelí no comentó por el momento lo sucedido.

El conflicto reavivó también las tensiones en la frontera entre Israel y Líbano, donde se producen disparos diarios entre el ejército israelí y el movimiento chiita libanés Hezbollah, aliado de Hamas.

El ejército y los servicios de emergencia israelíes anunciaron ayer la muerte de un civil en el norte debido al disparo de un misil antitanque reivindicado por Hezbollah.

En la noche, las fuerzas armadas informaron de dos heridos leves por otro misil antitanque y anunciaron bombardeos aéreos contra las bases de ese grupo libanés.