“Las crecientes tensiones entre republicanos y demócratas están provocando una ruptura en la sociedad estadounidense, y creo que ahora mismo América ya se encuentra envuelta en su segunda guerra civil”, dijo el Jefe de la Corporación Espacial Estatal Roscosmos de Rusia, Dmitry Rogozin, al canal de televisión Rossiya-24 el pasado jueves, según traducción de la agencia estatal de noticias rusa Tass.

Y no sólo él, sino también otros políticos, académicos, insiders y ciudadanos estadounidenses han vaticinado el estallido de una guerra civil en los Estados Unidos, así como una catástrofe económica si el cierre del Gobierno federal continúa durante meses o incluso años.

El cierre del gobierno estadounidense debido a una pugna entre demócratas y republicanos que explotó con la desaprobaron de una ley de gastos relacionada con el polémico financiamiento del muro entre México y EE.UU. sería la gota que derramaría el vaso.

Lo cierto es que el muro fronterizo empezó a ser construido años atrás por la dinastía Bush, y lo que ahora realmente está en juego es el desmantelamiento mundial del sistema capitalista, junto con el ya evidente colapso económico del sistema liberal global financista.

Según Daniel Estulin, “el globalismo que opera detrás de la facción demócrata es una bandera falsa más de la élite global, que camuflada bajo la máscara del libre comercio y el libre flujo humano se ha dedicado a instaurar el colonialismo corporativo de la era moderna para facilitar la imposición de su anhelado y totalitario Nuevo Orden Mundial.”

En el bando contrario, el industrialismo que opera detrás de los republicanos está controlado por la vieja aristocracia europea, que busca sustituir el corporativismo globalizante por un modelo nacionalista basado en regiones económicas que funcione bajo un nuevo sistema monetario respaldado en oro y activos físicos. Pero también hay quienes piensan que este antagonismo entre globalistas y nacionalistas es artificial y parte de un montaje prediseñado para instaurar el nuevo orden a través del caos.

De cualquier forma, el colapso financiero y la desesperada guerra secreta que los dueños del mundo libran entre sí para quedarse con el control del planeta, cada vez está en boca de más personas conscientes que se están dando cuenta de que cada guerra, cada revolución y cada cambio histórico en este planeta han sido planeados e inducidos artificialmente por un pequeño grupo de familias esoteristas que pueden rastrearse a lo largo de la historia hasta el Egipto prolomeico.

Rogozin no es el primero en plantear la posibilidad de una segunda Guerra Civil en medio del clima político polarizado en los Estados Unidos. En junio, el ex asesor de Trump, Roger Stone, advirtió sobre una posible guerra civil en una entrevista con Newsweek y, días después, la Universidad de California.

El profesor de Berkeley, Robert Reich, argumentó que el “malestar social grave” podría estar en camino, incluso si una guerra civil real sigue siendo poco probable. Más tarde ese mes, el congresista republicano Steve King tuiteó: “Estados Unidos se dirige hacia otro Harpers Ferry” y “Después de eso viene Ft. Sumter”, refiriéndose a la redada de los Confederados en el fuerte de los Estados Unidos que desató la Guerra Civil.

Insiders como Leo Zagami, de la Logia P2 del Vaticano, y Daniel Estulin, agente de contrainteligencia ruso, también se han referido a la inminente e inaludible Segunda Guerra Civil norteamericana.

Fuente: www.mentealternativa.com