Las compañías aéreas de Estados Unidos siguen atravesando profundas crisis debido al impacto de la pandemia de coronavirus en el mundo.

Por tal razón, y según se indica en los medios norteamericanos, se prevé que para octubre podrían ser despedidos unos 36.900 empleados de las mismas.

Tanto las empresas como los sindicatos del sector presionan para que el gobierno de Donald Trump atienda la situación y les otorgue a las compañías una nueva ayuda económica, tal como lo hizo en marzo de este año al desembolsar unos 25.000 millones de dólares para sostener todo el sistema aeronáutico.

Según indica la agencia de noticias AFP, la compañía Delta Air Lines ya anunció el posible despido de unos 1.900 empleados si no llega la nueva ayuda federal ya que la otorgada en marzo fue otorgada bajo la promesa de las empresas de no despedir personal hasta septiembre.

Tanto el sector empresarial como el sindical afectado por esta crisis vienen presionando al gobierno federal para que renueve las erogaciones previendo el indeseado desenlace que podría darse desde el mes de octubre.

Por su parte, y en tal sentido, el presidente Donald Trump manifestó en recientes declaraciones que la industria aérea está necesitada de ayudas más importantes.

A su turno, el Congreso de los Estados Unidos se encuentra actualmente negociando condiciones para el desembolso del dinero, aunque en el marco de las elecciones de noviembre que congelan este debate entre republicanos y demócratas.

Además, unos 7.000 auxiliares de vuelo y aproximadamente 3.000 pilotos de United Airlines se pueden ver afectados por las desvastadoras consecuencias de la pandemia de Covid-19.

En tal sentido, dicha empresa emitió un comunicado en el que describe: “La pandemia nos golpeó más profundamente y por más tiempo de lo que casi todos los expertos preveían, y en un entorno en el que la demanda por viajes sigue tan deprimida, United no puede continuar con efectivos que superan considerablemente nuestro nivel de actividad”.