El primer ministro francés, Edouard Philippe, presentó este viernes su renuncia y la de todo el Gabinete de funcionarios, como paso previo a una reformulación de la administración de Emmanuel Macron, tras haber transitado el tramo más grave de la pandemia de coronavirus.

Philippe formalizó su renuncia ante Macron «que la ha aceptado», informaron fuentes de la Palacio de Eliseo citadas por la agencia de noticias Europa Press.

De esta manera, los ministros y secretarios de Estado del actual Gabinete permanecerán en funciones hasta la designación de un nuevo equipo, según un escueto comunicado de la oficina de la Presidencia.

El movimiento en la cima del poder gubernamental no es una sorpresa, ya que Macron había anticipado la necesidad de una reformulación de su equipo de gobierno luego de las elecciones locales del fin de semana pasada pero, sobre todo, después de que el país atravesó, al menos la parte más grave, de la crisis sanitaria causada por el coronavirus.

Los comicios resultaron un fuerte revés para La República en Marcha (Lrem), el partido de Macron, que obtuvo un resultado peor al esperado.

Durante los últimos días, los medios franceses especularon con la salida del Ejecutivo de Philippe, que ganó las elecciones en la alcaldía de Le Havre, en el norte de Francia.