El chavismo llamó hoy a sus simpatizantes a “resistir”, luego de que el presidente interino de Venezuela designado por el parlamento, Juan Guaidó, convocará a nuevas manifestaciones callejeras destinadas a provocar la caída del gobierno que preside Nicolás Maduro.

“Hoy estamos obligados a resistir; nosotros no nos vamos a rendir, tendría que venir una operación de exterminio contra el pueblo chavista”, afirmó el número dos del chavismo, capitán Diosdado Cabello, en un acto partidario en Barquisimeto, capital del estado Lara.

Cabello recomendó tratar como “enemigos” a los compatriotas que piden una intervención militar en el país, mandó “al carajo” a la Unión Europea (UE) por reclamar elecciones libres en Venezuela y responsabilizó al “imperialismo” por la seguridad de Guaidó.

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“Cualquier ciudadano que se llame venezolano y esté llamando a la intervención militar en nuestra patria, en caso de ocurrir algún evento de esa naturaleza, debe ser tratado como un enemigo y aplicarle todas las acciones y formas que se le aplican a los enemigos”, dijo y remarcó que “a los traidores a la patria, ni agua”.

“La Unión Europea que se vaya bien largo al carajo porque aquí mandamos los venezolanos y las venezolanas; son unos inmorales; ¿quién elige el rey de España?”, señaló el militar en respuesta al plazo de ocho días que la UE dio al gobierno de Maduro para llamar a elecciones presidenciales libres.

Con respecto a la seguridad de Guaidó, dijo: “Si hay alguien responsable de lo que le pase a ese señor o a otros dirigentes, es el mismo imperialismo que tiene sus planes”.

“Nosotros no asesinamos a nadie”, sostuvo Cabello y aseguró que en las protestas iniciadas la semana pasada solo se registró un hecho violento, de un adolescente quemado vivo en el estado Mérida. “¿Quién lo hizo?”, preguntó, y respondió: “La derecha”.

En cambio, el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) y el Foro Penal Venezolano (FPV), las ONG que vienen computando las consecuencias de la represión de las protestas, informaron hoy que los muertos suman 35 y los detenidos, 850.