El presidente Volodimir Zelenski visitó este martes a tropas ucranianas que defienden ciudades del este de Ucrania amenazadas por Rusia, que volvió a desestimar una contraofensiva lanzada por Kiev y afirmó que no logró penetrar ninguna de sus líneas.

La visita de Zelenski al frente este de la guerra en Ucrania llegó luego de que la Fuerza Aérea ucraniana dijera haber destruido este martes 29 drones y un misil lanzados por Rusia durante una nueva serie de ataques nocturnos.

El presidente ucraniano dijo en la aplicación Telegram que había visitado a tropas del frente este en las ciudades de Kupiansk y Liman, que están bajo ofensiva del Ejército ruso.

«Hoy visitamos a nuestras brigadas que realizan misiones de combate en una de las zonas más candentes, la de Kupiansk y Liman», escribió Zelenski.

Kupiansk, en la provincia de Jarkov, es desde julio blanco de un embate militar de Rusia que busca complicar una contraofensiva paralela lanzada por Ucrania un mes antes en zonas ocupadas por el Ejército ruso en el este y sur ucraniano.

Ucrania dijo el mes pasado que Rusia había ampliado la ofensiva a Liman, provincia de Donetsk, una veintena de kilómetros al sur de Kupiansk. La ciudad fue recuperada por Ucrania en otra contraofensiva anterior, a fines de septiembre de 2022.

En su publicación, Zelenski incluyó un video en el que aparece junto a soldados en una zona fortificada.

El presidente detalló que habló de «la situación operativa en el campo de batalla, de temas de actualidad y de qué necesidades hay con los comandantes de brigada y con los combatientes», informó la agencia de noticias AFP.

Las autoridades ucranianas pidieron en agosto a la población que vive cerca de Kupiansk que evacuaran la zona, y el 20 de septiembre el Ejército indicó que temía nuevos ataques rusos.

En Rusia, en tanto, el ministro de Defensa, Seguei Shoigu, afirmó que los intentos de Ucrania de penetrar las defensas rusas en los frentes del este y del sur «fracasaron», casi cuatro meses después del inicio de la contraofensiva de las fuerzas de Kiev.

«Los intentos del enemigo de romper nuestras defensas en las zonas de Verbove y de Robotine en dirección de Zaporiyia fracasaron», dijo Shoigu durante una reunión del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, en alusión al frente sur.

En el frente este, el ministro afirmó además que el Ejército ruso «repelió todos los ataques en dirección a Soledar-Bajmut», una zona donde las tropas ucranianas también reivindicaron la toma de dos localidades.

«Nuestras tropas han debilitado significativamente el potencial de combate del enemigo y le infligieron importantes daños», dijo.

La anticipada contraofensiva ucraniana comenzó después de que las fuerzas de Kiev fueron pertrechadas con tanques occidentales y apuntaladas con entrenamiento.

Pero las tropas se enfrentan a potentes líneas atrincheradas rusas, con campos minados y trampas explosivas.

La operación ha logrado retomar sólo un puñado de localidades en un momento en que se acerca el invierno boreal.

En paralelo a los combates terrestres, Rusia ha continuado golpeando ciudades ucranianas lejanas al frente con ataques aéreos, con misiles y drones.

Por su parte, Ucrania ha multiplicado sus ataques con drones en Crimea, la sureña península ucraniana del mar Negro que Rusia se anexó en 2014, y en regiones de Rusia fronterizas con su territorio.

Hoy, la Fuerza Aérea ucraniana dijo en un comunicado en Telegram que Rusia atacó anoche distintas partes de Ucrania con 31 drones y un misil lanzados desde Crimea.

La defensa aérea «destruyó 30 objetivos aéreos en el sur y el este», incluyendo 29 drones y un misil de crucero Iskander-K, agregó la nota.

En septiembre, Moscú usó más de 500 drones contra Ucrania, un récord, según el grupo de consultoría ucraniano Defense Express.

El grupo prevé que Rusia recurra más a estos aparatos de bajo coste, pero que agotan las defensas aéreas enemigas.