Comerciantes gastronómicos de la ciudad se manifiestan haciendo lo que saben: cocinar. Por eso desde hoy, instalaron una carpa frente a Gobernación que funcionará las 24 horas de toda esta semana, desde donde entregan raciones de comida de manera gratuita para las personas en situación de calle.
Jorge Sauan, referente de Ugar habló con Conclusión y dijo que “estamos haciendo lo que sabemos hacer, somos gastronómicos. Es un reclamo que se alinea con la solidaridad y lo presentamos de esta manera, sirviendo y dándole de comer a la gente en situación de calle”.
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“Estaremos por tiempo indefinido, por eso el nombre del bar “24/7” donde tenemos pensado estar las 24 horas de los 7 días de la semana dando almuerzos y cenas a la gente en situación de calle”, precisó y amplió: “Es una idea que pensamos durante mucho tiempo, incluso definir qué alimentos darles de comer hasta el descartable que íbamos a usar. Por eso decidimos hacer un sándwich de bondiola y no un guiso o una polenta que es lo que normalmente ofrecen”.
Asimismo, Sauan aseguró que, aunque permanecerán de forma continua en el lugar, se respetarán los protocolos y las normas sanitarias sobre seguridad alimentaria. “Contamos con la ayuda de Rosario Solidaria, y de gente que nos ayuda a evitar la aglomeración y el amontonamiento”.
El reclamo, organizado por más de 50 comerciantes gastronómicos, es por más y mejor asistencia económica frente a la «crisis terminal» que sufre el sector ante la imposibilidad de hacer frente a los gastos corrientes. «Los cierres intermitentes atentan ferozmente contra la actividad comercial más golpeada por la pandemia», manifestó indignado.
“Hubo muchas actividades perjudicadas pero lo nuestro es una especie de muerte agónica porque es lenta, no te permiten laburar al 100% y tenemos gastos fijos, como la luz, que se nos complica mucho poder pagar”, describió preocupado la realidad que atraviesa el sector.
Si bien admitió que “es un momento sensible a nivel sanitario” aclararon que “así como colaboramos queremos que colaboren con nosotros y nos ayuden a mantener abierto nuestro negocio porque las medidas de ayuda que sacaron son ‘tibias’, ya cerraron más de 100 negocios y se han perdido 4.500 puestos de trabajo en la ciudad de Rosario”.
Consultado sobre los gastos que más los golpean, Sauan fue claro: “La realidad es que el Drei y el Etur que son los impuestos municipales, y que significan para nosotros un sueldo al año, no nos representa un monto significativo para las empresas o restaurantes. El que nos tiene y puede dar una mano significativa es el gobierno provincial, por eso estamos acá, frente a Gobernación”.
“Las ayudas que se instrumentaron son tibias, insuficientes. Necesitamos exenciones de algunos pagos de servicios, así como de algunos impuestos. Ya venimos acumulando desde marzo del 2020, estamos cansados”, enfatizó.
Por último, dijo que otro problema que se suma es que “con la incertidumbre que hay, el que se va después no quiere volver a alquilar porque piensa que es un alquiler de riesgo, que no va a cobrar”.
