La conmoción que generó el crimen de Máximo, el nene de 11 años que falleció tras recibir un disparo durante un ataque a balazos en Empalme Graneros, en el cual resultaron heridos otros tres niños, se convirtió en protesta. Convocados por familiares y allegados, una multitud marchó este viernes por la mañana desde la plaza 25 de mayo, frente a la Municipalidad de Rosario hasta la sede local de Gobernación. De la manifestación también participaron diversas organizaciones sociales y políticas.

«Lo que venimos a hacer es a pedir justicia, nada más que eso», expresó Ana, tía de Máximo a los medios a poco de comenzar la concentración. Queremos que se aclare todo esto, sólo eso», remarcó la mujer al tiempo que agradeció la presencia de todos los presentes, medios y manifestantes. «Nos sentimos acompañados por todas las organizaciones, por la gente, por el pueblo, no solo acá, sino en todos lados, y en la oración, porque sólo Dios puede hacer que esto no pase más en ningún lado».

Sobre la situación actual en el barrio, Ana contó que hace dos días que el barrio está un poco más tranquilo, pero también admitió «que la tranquilidad nunca se va a sentir del todo». «La verdad es que lo único que puedo hacer ahora es estar acá, en pie, pidiendo justicia. No puedo hablar mucho, me siento cansada, agotada, pero acá estoy».