En el marco del Día Internacional de la Lucha contra la Violencia hacia la Mujer, que se conmemora el 25 de noviembre, la organización “Mujeres de Negro – Rosario” realizó durante la mañana de este lunes, en las puertas de los Tribunales Provinciales –ubicados en Balcarce y Moreno–, su tradicional intervención urbana en donde recordó a todas las víctimas de femicidios que hubo en el último año.

En esta oportunidad, se pegaron sobre la vereda carteles con los nombres de las víctimas y, sobre ellos, una flor roja. También se pegaron fotos con los rostros de las mujeres que están desaparecidas en democracia.

En diálogo con Conclusión, la integrante del colectivo Mujeres de Negro, Marta Pérez, detalló: “A esta actividad la hacemos todos los años, dándole cuerpo a un número frío. Este año tuvimos 237 femicidios, es decir, mujeres asesinadas por sus parejas, ex parejas, novios, novias, esposos, esposas, en un marco de violencia machista”.

“Queremos visibilizar porque cada uno de esos cartelitos es una mujer que tenía un proyecto de vida, hijos, que quedaron huérfanos, historias que quedaron truncas y familias que están destrozadas. Poner los nombres con los claveles es darle cuerpo a ese número tan frío”, agregó la activista.

Por su parte, Eva Domínguez, también integrante del colectivo Mujeres de Negro, expresó que la violencia de género “sigue creciendo”, al tiempo que cuestionó la falta de políticas y de acciones interdisciplinarias para acompañar a las víctimas.

En este sentido, indicó que una iniciativa necesaria sería la de facilitar un trabajo a esas mujeres que sufren violencia, para que no deban volver a vivir con su agresor por necesidades económicas; y también apuntó que “no hay un acompañamiento integral” para las familias que se ven atravesadas por un femicidio.

Además, Domínguez señaló que “es muy difícil” denunciar la violencia de género, pero destacó el rol de los Centros Territoriales que existen en Rosario, los cuales contienen a las personas que van a reportar este tipo de hechos. Sin embargo, advirtió que en las comisarías no ocurre lo mismo y muchas veces “cajonean” las presentaciones.

 

En este sentido, Pérez señaló: “Otro problema que existe es el accionar de la Justicia. Hay violentos que tienen medidas cautelares y tienen diez denuncias por no respetarlas, pero siguen libres”.

Que las intervenciones de este colectivo –que se vienen realizando desde hace ocho años– sean siempre en las puertas de los Tribunales Provinciales no es azaroso: de esta manera, la agrupación le reclama a la Justicia que, entre otras cosas, haga cumplir las medidas cautelares, como las perimetrales, mediante las cuales los agresores tienen prohibido acercarse a menos de 200 metros de sus denunciantes.