Jubilados cierran el año con el “tradicional brindis de pan y agua”. Este mediodía concentraron en las puertas del Pami para pedir por una atención digna ante el constante “deterioro de atención, de insumos, de escases de personal” lo que “siempre termina en perjuicio de los afiliados”.

Ernesto Sosa, referente de la mesa coordinadora de jubilados habló con Conclusión y señaló que “lo que estamos buscando es salir del olvido de todos los gobiernos, porque el lugar donde estamos el año que viene cumple 51 años de existencia y sin embargo en todo ese tiempo nunca fue dirigido como corresponde”.

Te puede interesar: Dos jubilados rosarinos necesitaron en noviembre $55.400 para no ser pobres

“El Pami enfrenta un deterioro de atención, de insumos, hay escases de personal, hay gente precarizada. Y obviamente que para con nosotros la asistencia cada vez es más precaria. Hay un cúmulo de cuestiones que siempre van en perjuicio de los afiliados al Pami”, se quejó indignado.

Asimismo, consideró que “son cuestiones a las que tienen que encontrarle solución y nos preocupa mucho porque tanto de Anses como de Pami no hay respuestas. Hay un desmaneje que nos preocupa” y agregó: “Esto se resuelve en Buenos Aires. Se lavan las manos olímpicamente”.

“Hay una política que yo grafico con un manual debajo de la almohada y cualquiera que asume en estas condiciones, levanta la almohada, abre el manual y aplica con algunos matices distintos lo mismo que el anterior. Y esa constante es la que queremos quebrar para obtener la atención que merecemos”, finalizó Sosa.