#NiUnaMenos quedará en la memoria de miles de argentinos que ayer, en una marcha multitudinaria propagada en más de 100 puntos del país, dijeron no a la violencia de género y reclamaron Justicia para las víctimas.

En Rosario, el Monumento Nacional a la Bandera se colmó de distintos sindicatos y organizaciones no gubernamentales y políticas, así como de miles de ciudadanos que se movieron hasta allí para pedir #NiUnaMenos.

El día después es para las repercusiones, para saber qué se dijo. Y desde varios partidos y referentes políticos se expresaron para analizar lo que fue un histórico «3J».

La intendenta Mónica Fein estuvo presente en la movilización, a la que asistió acompañada por miembros de su gabinete y funcionarios nacionales y provinciales, y destacó que «una gran parte de la sociedad ha tomado conciencia de que hay mujeres que se mueren por cómo educamos a los jóvenes, por cómo discriminamos a la mujer, porque la consideramos una persona inferior y no la respetamos».

Asimismo, la mandataria aseguró que «tenemos una gran responsabilidad quienes gobernamos de hacer las cosas mejor» y señaló que la multitudinaria concentración, a la que asistieron miles de rosarinos, «es un ejemplo de compromiso que debemos seguir profundizando».

En tanto, el candidato a gobernador por el Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS), Miguel Lifschitz, también se sumó a la marcha y dijo que «venimos a la marcha como ciudadanos, que apoyan la lucha contra la violencia de género, y diariamente apuestan a construir una sociedad más igualitaria».

«En 2014 hubo al menos 277 asesinatos a mujeres en Argentina, es decir un femicidio cada 31 horas, lo que muestra una situación alarmante, que necesita de profundas políticas de estado, entre los diferentes niveles y las distintas esferas, para lograr hacer retroceder estos índices de violencia, que por su condición cuestan visibilizar en la sociedad de hoy», desarrolló.

Entre los participantes, el Centro de Estudios Igualdad Argentina, a través de su presidente, el senador nacional Rubén Giustiniani, y representantes del área de género y de juventud, señalaron: «Creemos que la participación del conjunto social y de las diferentes organizaciones que luchan por los derechos de las mujeres y los derechos humanos, es la herramienta más eficaz para reclamar al Estado, en sus tres niveles, la aplicación de políticas y medidas efectivas que permitan acabar con un flagelo que día a día termina con la vida de mujeres y otorga impunidad a muchos agresores».

Por su parte, la diputada provincial Silvia Augsburger expresó que «ha sido una gran jornada para todo el país, porque el tema de la violencia hacia las mujeres era un tema que hasta hace poco sólo convocaba a quienes trabajábamos en la temática. La gran convocatoria de hoy expresa que se está registrando que como sociedad, debemos exigir un mayor compromiso del estado para que dejen de morir mujeres por el solo hecho de ser mujeres».

«Esperamos que la jornada de lucha que hoy tuvo lugar, sirva para que el Estado, quien es el principal  responsable de garantizar el derecho de las mujeres a una vida sin violencia, tenga un rol más activo para prevenir todas estas muertes evitables, y ponga en marcha las herramientas para que los golpeadores y asesinos tengan condena efectiva, porque no hay nada peor para estos hechos que la impunidad«, finalizó Augsburger.

Violencia de género

La violencia contra las mujeres constituye una violación de los Derechos Humanos y de las libertades fundamentales que limita total o parcialmente a las mujeres el reconocimiento, goce y ejercicio de sus derechos. La violencia sexista es una ofensa a la dignidad humana y una manifestación de las relaciones de poder entre mujeres y varones, que se refleja tanto en el sociedad, las familias, como en ámbitos laborales.

Argentina no cuenta con cifras oficiales de violencia sexista. En el año 2009 fue sancionada la Ley 26.485 “Ley de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales”. Dicha ley estableció en su artículo 12, la creación del “Observatorio de la Violencia contra las Mujeres en el ámbito del Consejo Nacional de la Mujer” destinado al monitoreo, recolección, producción, registro y sistematización de datos e información sobre la violencia contra las mujeres. Hasta hoy este observatorio no se ha implementado.

El diseño de estrategias efectivas de prevención y reducción de la violencia depende de la disponibilidad de información fiable y válida sobre la violencia en función del sexo, edad, relación con la víctima y el victimario, etc. Hasta hoy, la única información de la que se dispone ha sido elaborada y difundida por las organizaciones de la sociedad civil que han llevado a cabo esta tarea debido al vacío dejado por el estado.

Los únicos datos con los que se cuenta a nivel nacional son los que año a año da a conocer “La Casa del Encuentro” a través de su Observatorio de Femicidios “Adriana Marisel Zambrano”, que arrojan que cada 30 horas una mujer es asesinada en nuestro país y que en el año 2014 fueron asesinadas 277 mujeres en manos de sus parejas o ex parejas.

 

 

 

Foto: Florencia Vizzi