Por Santiago Fraga

Luego de un período de alta especulación tras el cambio de gobierno, los primeros precios del 2016 muestran una tendencia favorable para los compradores de autos de alta gama y media, pero con un aumento que afecta directamente a los más económicos y usados.

No obstante, si bien hay lugares en donde la venta ha mermado, momentáneamente, las consultas siguen llegando a las concesionarias, que de esta forma ven los cambios sucedidos como algo positivo, ya que hasta incluso se esperaban un aumento aún mucho peor.

Lo cierto es que hay dos factores que influyeron a la hora de la conformación de esta nueva lista de precios. Por un lado, el cambio tributario, la quita del impuesto a la importación de los autos de alta gama y la apertura misma de estas importaciones, es lo que llevó a que los autos de alta gama desciendan hasta un 25% en sus precios, como es el caso de Peugeot, según pudo averiguar Conclusión. Por su parte, otras marcas como Mercedes Benz, Toyota y Volkswagen bajaron los precios de sus autos más costosos entre un 10 y 20%, traduciéndose en pesos en descensos de hasta $289.000.

En cuanto a los autos de mediana gama, en general han sufrido un leve aumento o han mantenido sus precios, pero es en los autos de baja gama donde la devaluación tuvo su efecto y se tradujo en aumentos de hasta un 15%.

En el caso de Renault, por ejemplo, su auto más económico, el Clio Mío, sufrió un aumento del 12,30%, unos 20 mil pesos aproximadamente, costando ahora unos 166.300 pesos. No obstante, los cambios económicos, pese a traducirse en aumento de precios en algunos casos, favorecieron a la producción de ciertos modelos de automóviles, como por ejemplo el Renault Fluence Privilege, provocando que si bien aumenta su precio hasta en un 15%, sea mucho más fácil que haya modelos a la venta, transformándolo en una opción conveniente ante otros autos en exhibición.

A su vez, si bien también ha aumentado el precio de los usados al estar ligado al valor de los cero kilómetros, la venta de estos ha aumentado respecto de meses anteriores y sigue siendo muy elegida por los consumidores.

En relación a los precios, en general no se esperan muchos grandes cambios a lo largo del año. Poco a poco los números se van acomodando a la realidad económica actual, y no se espera que para fin de año el balance de aumentos entre enero y diciembre difiera de años anteriores.