En el marco de las acciones que viene desarrollando la municipalidad de Rosario para recuperar el espacio público y revalorizar el patrimonio local, la Dirección General de Alumbrado Público restauró, puso en valor e instaló cuatro Escudos Nacionales Argentinos en distintos puntos de la ciudad.

Funcionarios del municipio explicaron, que tres de estas piezas de importante valor patrimonial están emplazadas en el entorno del Monumento Nacional a la Bandera, mientras que, el cuarto emblema se encuentra ubicado en el tradicional calendario del Parque Independencia.

De acuerdo a los datos aportados por la repartición dependiente de la Secretaría de Ambiente y Espacio Público, cada escudo cuenta con 489 nuevas lámparas LED (35 rojas, 60 amarillas, 210 verdes, 38 naranja, 58 blancas y 88 celestes): “Hicimos un trabajo artesanal excepcional. Los equipos trabajaron durante largo tiempo para restaurar las piezas”, expresó Jorge Nocino, director de Alumbrado Público.

“Son Escudos que tienen un gran valor patrimonial para la ciudad y para el país”, concluyó el funcionario municipal.

La Secretaría de Alumbrado Público destacó que las estructuras lumínicas poseen significativo valor histórico y, según datos oficiales, fueron vistas por primera vez el 20 de junio de 1957, en el marco del acto de inauguración del Monumento Nacional a la Bandera.

Recordaron, que, en aquel momento, el gobierno de facto encabezado por el general Pedro E. Aramburu llevó a cabo una multitudinaria ceremonia inaugural, con actividades previas y posteriores que completaron el festejo.

El escudo argentino es la fiel reproducción del sello que usó la Soberana Asamblea General Constituyente de las Provincias Unidas del Río de la Plata, ordenado el 12 de marzo de 1813. Hasta esa fecha no existía un sello para legislar los actos gubernamentales.

Por tal motivo, la Asamblea comenzó a utilizar el sello que hoy constituye el Escudo Nacional. Cabe destacar que antes de su sanción legislativa, Manuel Belgrano lo usó como símbolo central de las tropas emancipadoras, y fue reconocido por pueblos y gobiernos provinciales como símbolo del naciente Estado argentino.

En cuanto a su simbolismo, se considera que los antebrazos humanos que estrechan sus diestras en el cuartel inferior representan la unión de los pueblos de las Provincias Unidas del Río de la Plata.

Además, el gorro de gules -comúnmente denominado frigio- es un antiguo símbolo de libertad y la pica (lanza corta) evidencia el propósito de sostenerla, de ser necesario, con las armas.

En cuanto al sol incaico en su posición de naciente anuncia al mundo la aparición de una nueva nación. Los laureles son símbolo heráldico de victoria y triunfo, y evidencian las glorias ya adquiridas en los campos de batalla, y Las cintas celestes y blancas representan a la Nación Argentina.