Los empleados públicos víctimas de agresiones durante el desempeño de sus funciones verán de ahora en más simplificado el trámite de realización de la denuncia correspondiente, a la vez que serán preservados sus datos filiatorios.
La medida fue adoptada por la Municipalidad luego de alcanzar un acuerdo con el Sindicato de Trabajadores Municipales. El desencadenante fue la situación que el jueves pasado sufrieron dos médicas del Hospital Roque Sáenz Peña, golpeadas e insultadas en la guardia en primer término y demoradas durante cuatro horas cuando fueron a efectuar la denuncia a la comisaría 15ta.
El entendimiento se dio este martes, luego de una protesta frente al nosocomio donde ocurrieron los hechos señalados, el lunes, de la que participaron distintas organizaciones para reclamar por mayor seguridad para cumplir sus tareas. Por el lado del municipio, participó el área jurídica de la Secretaría de Salud Pública de Rosario.
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Además, desde el gremio resaltaron la necesidad de paliar situaciones en la que son “doblemente víctimas”. Por eso, no sólo no deberán radicar de aquí en más la denuncia en comisaría ante agravios en el lugar de trabajo, sino que tampoco quedará registro de sus datos filiatorios.
A partir de estos, a los que podían acceder tanto abogados defensores de los denunciar como los mismos imputados, tuvieron lugar varios hechos de amenazas ante la radicación de denuncias.
Por su parte, desde la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra) aseguraron que son cada vez más los médicos que trabajan con miedo por las agresiones que sufren a diario y advirtieron, además, que no dan abasto con la creciente demanda de atención de pacientes.
