El asesinato de Máximo Geres, de 11 años, en Empalme Graneros, movilizó y desató al barrio, que este lunes se organizó y realizó una pueblada, en Cabal 1300 Bis, en busca de los posibles involucrados, que disponían de un bunker en esa zona. Hubo incendios, saqueos y enfrentamientos con la Policía.
Al respecto, el tío del menor, en diálogo con Conclusión, expresó: “Esto comenzó después de que falleció Máximo. La gente decidió hacer esto porque la situación no da para más, los tiros no eran para los chicos, eran para ellos (banda narcotraficante)”.
“Espero que esto se termine, no se puede vivir más así. Venimos a comprar y nos tenemos que esconder, ¿por qué tiene que ser así?”, se preguntó.
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“Ellos estaban amenazados de muerte. Con las pistolas que agarró la policía tiraron tiros hoy también”, indicó.
Consultado sobre el accionar policial contra los vecinos, sostuvo: “La policía reaccionó porque estaban protegiendo a ellos, ya que les dan plata”. “Tenemos miedo. Yo estoy jugado, tengo mis hijos, mi nieta y mis hermanos, ahora estamos todos juntos. El barrio está unido”, dijo.
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“También tienen bunkers en otros barrios, con soldaditos comprados. Es increíble la cantidad de chicos que hay, no queremos otro Máximo. Nosotros sufrimos, ya cuando volvíamos del cementerio estaban preparados y tuvimos que reprender, empezaron a los tiros”, afirmó. “Mi cuñado está muy mal. Hace muchos años que vive acá, la familia va a estar para sacarlo adelante, esto va por todos”, comentó.
En referencia a si esta situación puede sentar un precedente en otras zonas de la ciudad, manifestó: “El resto de los barrios tienen que levantarse como nosotros, estamos todos en la misma. Hay una impunidad absoluta”.
