Rosario da para todo. Una vecina acudirá a la Justicia para impedir el segundo recital de La Renga, próximo jueves, por “las molestias que ocasionan las vibraciones”.

Se trata de la arquitecta María Carbone, que vive a siete cuadras del Coloso, en la zona de Italia y Cochabamba, quien se quejó porque su departamento «vibró o se sacudió como si hubiera ocurrido un sismo».

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«Voy a presentar un recurso de amparo. Me llama la atención que la Municipalidad habilite un espectáculo que trae consecuencias a la salud. Las molestias que ocasionan las vibraciones. Está el Código Civil, el derecho a la salud que tiene rango constitucional. Aunque el evento está habilitado, este evento no pude privarnos del derecho a vivir en paz. Fueron cuatro horas de terror», afirmó Carbone.

Así describió la arquitecta lo vivido el sábado por la noche, mientras la popular banda del rock argentino sonaba en el Parque Independencia. «Lo del sábado fue un desastre. Nunca pensamos que la Municipalidad podría habilitar, con todas las ordenanzas que hay y con el Código Civil que prevé la preservación de derechos a vivir una vida tranquila, en el centro de la ciudad un evento de esta naturaleza», expresó.

¿Qué dijo la Municipalidad?

El subsecretario de Defensa Civil, Gonzalo Ratner, admitió que el sábado ingresaron muchos llamados al 103 sobre temblores, pero aseguró que ninguno revestía peligro. Explicó que “difícilmente el sonido pueda causar daños en las estructuras”. Y en tal sentido, señaló que ni siquiera los terremotos de 2015 y 2016 en Chile que repercutieron en la ciudad provocaron daños.

“El desconocimiento del origen fue lo que generó pánico (entre algunos vecinos)”, señaló y aseguró que cada queja “terminó en buenos términos” al aclarar la causa del fenómeno.

“Desde Defensa Civil no hay ninguna contraindicación para llevar adelante el recital (del jueves)”, aclaró.