El gobernador Miguel Lifschitz realizó declaraciones este domingo con respecto a la situación económica del país y de Santa Fe, asegurando que si bien el panorama nacional es preocupante, la provincia tiene herramientas para salir adelante.

«Estoy preocupado. Pero también digo que tenemos una provincia sólida en su estructura económica y productiva. Viene muy bien la cosecha de soja, que va a tirar para arriba, al igual que lo vinculado a la industria del agro. Eso va a ser positivo para Santa Fe», indicó el mandatario provincial al Diario La Capital.

A su vez, aseguró que hay un «costo social importante» en la transición entre el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y el de Mauricio Macri, y que incluso «puede agravarse en los próximos tres o cuatro meses».

«Estamos en un escenario distinto, y en un período de transición de la economía: de un modelo kirchnerista pasamos a uno que se está construyendo, que es el de Macri. En el medio de uno y otro hay un costo social importante, que nosotros lo estamos sintiendo en Santa Fe desde hace unos meses, y que tengo la sensación de que se puede agravar en los próximos 3 ó 4 meses», advirtió Lifschitz.

Por otro lado, también sostuvo que en Argentina más que hacer un balance de 100 días se «juega el día a día», y pasó a hacer hincapié en lo referido al impacto de las tarifas a la provincia.

«El impacto de las tarifas nos complica muchísimo en Santa Fe. La tarifa eléctrica en primer lugar, pero ahora viene el gas, transporte. Y todo eso impacta sobre la inflación. Hay industrias que son electrointensivas y que la suba de tarifas las pone en situaciones complicadas. Y siempre la variable de ajuste termina siendo el empleo, que es lo que más nos preocupa, porque ese es un camino peligroso», concluyó el gobernador.