Con miras a establecer una fuerza de intervención inmediata, la Jefatura de la Policía de Santa Fe ordenó la realización de acciones de disuasión y protección social en zonas definidas como prioritarias a partir del análisis de información proveniente de distintas fuentes como los “mapas de calor” del Sistema de Emergencias 911, la base de datos del Ministerio Público de la Acusación (MPA) y la relevada por las áreas de investigación de la Policía de Santa Fe.
El objetivo central del despliegue territorial de protección social, que convocó a 320 efectivos, 16 móviles y el apoyo aéreo del helicóptero de la Policía provincial, fue el de acercar a los efectivos policiales y los habitantes de las zonas de actuación.
“Se puso en territorio personal para interactuar y tener un contacto directo con los vecinos”, señaló el jefe de Región Rosario, José Luis Amaya. Al tiempo que se realizan tareas de patrullaje y acciones definidas en coordinación con el MPA, se releva información sensible para la prevención del delito e información vinculada con problemáticas de índole social –a nivel económico, de salud, educación, trabajo, condiciones de habitabilidad, entre otras –, que será elevada a las áreas de gobierno municipal y provincial que tengan competencia en la materia.
La planificación de los operativos se realizó en forma conjunta entre la Jefatura de la URII y analistas de la Central de Análisis de Procesos (Cenap), dependiente del Ministerio de Gobierno y Reforma del Estado. El despliegue contempló la acción coordinada de la Justicia provincial, a través del Ministerio Público de la Acusación; las fuerzas especializadas como la Policía de Acción Táctica (PAT), la Policía de Investigaciones (PDI) y la Secretaría de Delitos Complejos. Asimismo, se notificó a la totalidad de la Fuerzas Federales con asiento y jurisdicción en la ciudad, previendo su necesaria intervención por cuestiones de competencia.
El operativo en números
La ejecución del Plan de Operaciones incluye 320 efectivos de la Policía de Santa Fe, en turnos de 12 horas (diurno-nocturno).
El despliegue involucra el patrullaje a pie en trinomios que cuentan con el apoyo de 16 móviles, distribuidos estratégicamente por cuadrantes, y un helicóptero de la Brigada Aérea, en apresto a requerimiento.
Se cuenta también con el trabajo coordinado de la Central de Análisis de Procesos, a través de un equipo de 12 analistas asentados en el Centro de Comando, durante las 24 horas; de la Municipalidad de Rosario, a través de la disposición de agentes y operativos de la Dirección General de Tránsito y de personal y ambulancias del Sistema Integral de Emergencias Sanitarias (SIES); y dos funcionarios del Ministerio Público de la Acusación.
Asimismo, se instaló en retén con unidades de la PDI y de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones (DGPCA), dependiente de la Secretaría de Prevención e Investigación de Delitos Complejos del Ministerio de Seguridad, para cuando sean requeridos en una actuación específica que amerite su intervención.
