Durante las primeras horas de la mañana de este miércoles, efectivos de la Dirección de Contrainteligencia de la Policía de Investigaciones (PDI) de Rosario llevó adelante una batería de allanamientos en barrio Tablada y en Villa Gobernador Gálvez. Como resultado se pudo desarticular una banda que se dedicaba a organizar balaceras contra distintos domicilios con el fin de usurparlos. En una de las viviendas se secuestró material estupefaciente.
Comandados por Sergio Sánchez, jefe de la Brigada de Contrainteligencia de PDI, se realizaron 16 allanamientos y se logró el arresto de siete personas, de las cuales cinco tenían un rol activo dentro de la banda que organizaba los ataques, amenazaba a los vecinos y usurpaba las vivienda de Tablada, y dos de ellos podrían tener algún otro tipo de vinculación. Todos ellos, identificados como Lucas S. (20), Jonatan A. (23), Brian B. (26), Jonatan M. (27), Leonardo M. (28), Matías G. (30) y Facundo C. (30), quedaron a disposición del Dr. Edery, quien fue el que solicitó las ordenes para irrumpir en los domicilios.
Los procedimientos se realizaron, 15 en Rosario y uno en Villa Gobernador Gálvez. Los domicilios donde se produjeron las requisas están ubicados tres en Pasaje Medici al 4600, dos en Garibaldi al 200, dos en Ayacucho al 4400, uno en Necochea al 4200, Uriburu al 200, Chacabuco al 4100, uno en Ameghino al 100 y otro al 200, uno en Pasaje Medici al 4500, uno en Santa Rosa de Lima y Patricias Argentinas y el último en Alvear al 800, en Villa Gobernador Gálvez.
Los detenidos, junto al material informático – en su mayoría teléfonos celulares – y los estupefacientes secuestrados, fueron trasladados a sede de la Policía de Investigaciones, lugar donde permanecerán hasta tanto se defina como continuar según las directivas del fiscal. Uno de los siete arrestados quedó a disposición del Juzgado Federal n° 3, secretaria B y Fiscalía Federal n° 3 debido a que en su domicilio, de calle Ayacucho al 4400, se secuestró un kilo de cogollos de marihuana y otros elementos que hacen presumir que iba a ser comercializado.
Según información brindada por la PDI, la denuncia que dio origen a la investigación se recepcionó el pasado 30 de marzo luego de que se produjera un ataque a balazos contra el frente del Centro Cultural “Alas para Crecer”. Con una serie de medidas investigativas se pudo determinar que los ataques eran perpetrados por este grupo de sujetos quienes tenían como finalidad usurpar viviendas y hacer negocios con ellas.
