Un hecho que mantuvo en vilo a toda una familia tuvo lugar este jueves en la zona sur de la ciudad. Dos hombres robaron un vehículo que estaba estacionado pero en el mismo una mujer y su hijo esperaban al padre del mismo que había bajado a hacer un mandado.

La familia paró el auto, un Fiat Idea plateado, frente a una panadería ubicada en Biedma y Iriondo. Mientras el hombre bajo a comprar facturas, su esposa y su hijo, de 10 años, se quedaron dentro del vehículo para esperarlo. Fue en ese momento cunado dos hombres, muñidos con armas de fuego se subieron al rodado y se lo llevaron.

La angustiante carrera finalizó media hora después, aproximadamente, en las inmediaciones de  Iriondo y Cagancha, en una zona de viviendas precarias. Allí fueron liberados los improvisados rehenes, que tuvieron que caminar varias cuadras hasta encontrar ayuda. Ambos estaban ilesos, pero en estado de shock.