La declaración que dio el empresario Leonardo Fariña ante el juez federal Sebastián Casanello en la causa por presunto lavado de dinero se dio a conocer anoche y entre otras cosas remarcó la relación que había entre Lázaro Báez y el ex presidente fallecido Néstor Kirchner.

El empresario que hace unos días fue excarcelado declaró ante Casanello y el fiscal federal Guillermo Marijuán el pasado 8 de  abril durante 12 horas y su testimonio explosivo para la causa abarcó 85 páginas, según difundió el portal Infobae.com.

Los dichos del ex marido de la modelo Karina Jelinek derivaron en la imputación penal de la ex presidenta Cristina Kirchner, del ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido, el ex presidente del Banco Nación Juan Carlos Fábrega y de otras 12 personas.

También produjeron allanamientos en Santa Cruz y Chaco, aportaron más información a la investigación iniciada en el año 2013 y revelaron un entramado de lavado de dinero en el que se hallan involucrados personajes que pertenecieron al kirchnerismo.

Asimismo, Fariña dio nombres de financistas que aportaron sus conocimientos para que se evitara rastrear el dinero proveniente de maniobras ilícitas y girado al exterior, además de revelar  nombres de cuentas y empresas en otros países que fueron utilizadas para mover el dinero que sacaban desde la financiera SGI, más conocida como «La Rosadita».

«La realidad es que a diferencia de otros empresarios, más allá del negocio que tenía en común Néstor Kirchner con Lázaro Báez, Lázaro guardaba parte del dinero de Néstor Kirchner proveniente de los negocios y cuando Néstor muere, Cristina no estaba al tanto de todo lo que Báez tenía. Esto me lo contó Lázaro Báez a mí, como se lo contaba a un montón de personas», reveló el empresario.

Además, prosiguió: «Por este motivo, los primeros movimientos de dinero al exterior, se hicieron posteriores y muy cercanos a la muerte de Néstor Kirchner. Porque ella junto con su hijo, fueron golpeando a los empresarios más emblemáticos amigos del marido, reclamando lo que teóricamente era de él, y ahí es donde viene el cortocircuito entre Lázaro Báez y Cristina Kirchner«.

De esa manera, contó cómo era la relación entre Néstor y Báez, quien construyó su emporio empresarial gracias al ex mandatario fallecido.

«Lázaro decía textualmente: ‘Néstor era mi amigo desde siempre. Ella no. Esto lo hice con mi amigo y queda acá'», contó Fariña.

«En el tiempo que estuve en Austral, que fue de marzo de 2010 hasta abril de 2011, me constan los estrechos contactos entre el Sr. Báez y el Sr. Kirchner como, a su vez, posteriormente a su muerte con la Dra. Cristina Fernández«, agregó el empresario.

La relación entre Cristina Kirchner y Lázaro Báez

Fariña detalló que luego de la muerte de Néstor, «el señor Báez accede a realizar determinadas operaciones con parte de su caudal de dinero negro» y acentuó que «fue después de su muerte, ya que primero, parte de ese dinero había sido guardado por Lázaro pero era propiedad de Néstor y segundo, porque al momento de iniciar determinadas operaciones, en su momento la Presidenta no tenía conocimiento de la existencia de algunas cosas».

Luego señaló que Cristina Kirchner «junto con su hijo, fueron golpeando a los empresarios más emblemáticos amigos del marido, reclamando lo que teóricamente era de él, y ahí es donde viene el cortocircuito entre Lázaro Báez y Cristina Kirchner».

«Lázaro decía textualmente: ‘Néstor era mi amigo desde siempre. Ella no. Esto lo hice con mi amigo y queda acá’, refiriéndose a su emporio», añadió.

El empresario explicó que «con SGI, los proveedores se ahorraban un costo en el descuento del cheque», ya que «en ese momento, un cheque en Santa Cruz se estaba descontando entre 8 y 10 por ciento directo mensual, esto en un cheque a treinta días, mientras que en la city porteña, entre 3 y 4 por ciento».

«La diferencia de ese spread era recupero de costo para Austral o, en su defecto, ganancia para SGI, que era lo mismo. Otro motivo de la compra de SGI fue la posibilidad de hacer descuento por cheque propio, técnicamente a costo cero. Austral emitía para esto un cheque, lo tomaba luego SGI, esta lo descuenta y le entrega circulante líquido a Austral con un cheque respaldado por su propia empresa», aseveró.

Otro de los detalles importantes en la declaración de Fariña fue cuando sostuvo que «el dinero en efectivo usado en ésta y otras operaciones llegaba del sur y permanecía en distintos lugares no más de un día hasta que se hacía una operación».

«Así, el dinero se guardaba en un departamento del barrio de Belgrano perteneciente a Lázaro Báez. En el período en el que yo estuve vinculado a toda esta gente el dinero venía del sur, y paralelamente, entre fines del 2010 y principios de 2011, empezaron a llevar físicamente por tierra mucho dinero en camiones de Austral a la provincia del Chaco, donde tienen la empresa denominada Adelmo Biancalani e Hijos», indicó.