El Gobierno tiene en sus manos la decisión de autorizar la extradición del narcotraficante Ibar Pérez Corradi a los Estados Unidos, luego de que la jueza federal Sandra Arroyo Salgado le recordara a la canciller Susana Malcorra que es facultad exclusiva del Poder Ejecutivo disponer la extradición de un acusado a otro país.

El detenido está involucrado en una causa por tráfico de pastillas de oxicodona al país norteamericano, que requirió su presencia.

El pedido de extradición, que se encuentra en el juzgado de Arroyo Salgado, fue avalado por la Corte Suprema de Justicia en diciembre de 2010, pero el entonces canciller, Héctor Timerman,
había manifestado que Pérez Corradi tenía pendiente en la Argentina la acusación por la denominada «mafia de los medicamentos».

En aquellos tiempos, el narcotraficante se encontraba en manos de la Justicia, ya que en 2012 se escapó y recién fue capturado en junio de este año en la Triple Frontera entre
Argentina, Paraguay y Brasil.

Al respecto, su abogado Carlos Broitman afirmó que «a mucha gente le va a convenir que Pérez Corradi esté en los Estados Unidos», aunque aclaró que «acá está cuidada y preservada su vida».
«La realidad es que tiene que dar muchas explicaciones en Estados Unidos», añadió el letrado.

La jueza federal de San Isidro le recordó a la ministra de Relaciones Exteriores y Culto que es facultad exclusiva del Poder Ejecutivo disponer la extradición a otro país de un acusado, así como también le envió un escrito a su par María Romilda Servini de Cubría, quien investiga la causa de la «mafia de los medicamentos».

Consultado respecto a la postura que tomará ante el proceso de extradición, Broitman manifestó: «Nosotros no vamos a interferir, ni vamos a apelar lo que decida Servini de Cubría».
«Si requiere la presencia de Pérez Corradi en la Argentina no vamos a oponernos a clarificar todo. Vamos a consentir el traslado de Pérez Corradi», concluyó el abogado.

Por su parte, su otro letrado defensor, Juan José Ribelli, insistió en que «quiere resolver las causas judiciales en la Argentina y en los Estados Unidos».