El Ministerio Público (Fiscalía) panameño abrió líneas de comunicación directa con procuradores y fiscales latinoamericanos que investigan delitos financieros, tras el estallido del escándalo financiero Panamá Papers, «para limpiar en alguna medida la imagen de Panamá», dijo la procuradora general del país, Kenia Porcel.

Porcell indicó que contactó y respondió solicitudes de asistencia remitidas por procuradores generales y fiscales de Venezuela, Perú, Guatemala, El Salvador y Costa Rica, para esclarecer los hechos.

Añadió que con ello, se espera «limpiar el nombre de Panamá», afectado por el escándalo.

«Panamá y el Ministerio Público van a brindar toda la colaboración que se requiera para aclarar este hecho y determinar si hay o no delitos, y, sobre todo, que esto va a contribuir a limpiar, en alguna medida, la imagen de Panamá», subrayó la procuradora.

Ayer, en rueda de prensa, el presidente panameño, Juan Carlos Varela, dijo que busca alcanzar un acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para evitar que Panamá sea incluido en listas de países no cooperadores en la lucha contra la evasión fiscal y el «lavado de dinero».

Simultáneamente, el gobierno de Panamá lanzó na campaña para demostrar que «Panamá es más que papeles», y que posee una plataforma de servicios que beneficia al mundo.

En tanto, Porcel explicó que el fiscal segundo Javier Caraballo inició el martes un allanamiento y una exhaustiva investigación en las oficinas de la firma Mossack Fonseca, especializada en crear empresas offshore en guaridas fiscales alrededor del mundo y principal señalada en el escándalo Panamá Papers.

La diligencia dirigida por Caraballo abarca la revisión de diversos documentos impresos y digitales, sobre sociedades anónimas en Panamá, así como pesquisas en el Data Center Internacional de la empresa telefónica que da soporte informático a Mossack Fonseca, que posee unos 500 empleados y oficinas en más de 40 países.

Por otro lado, la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) confirmó el inicio de unas pesquisas en Panamá relacionadas con hechos que tienen implicaciones internacionales.