Este lunes la Multisectorial por un Transporte Público Verdadero realizó una protesta frente a la Municipalidad de Rosario en contra del aumento de la tarifa del boleto del colectivo y de los recortes y modificaciones de recorridos que se pusieron en marcha el pasado 25 de enero, tras el rediseño impulsado por el Ejecutivo municipal en el marco de la aprobada emergencia del sistema público de transporte.

Octavio Crivaro, dirigente del Movimiento Socialista de los Trabajadores e integrante de la Multisectoral, apuntó que la emergencia del transporte  «es una emergencia basada en la necesidad de mantener un negocio a costa de empeorar las condiciones laborales de los choferes y empeorando drásticamente las condiciones para viajar de cualquier vecino».

«Ya era un servicio verdaderamente deficiente» remarcó Crivaro y señaló que «ahora, directamente, han aislado a los sectores populares». «Si Rosario era una ciudad desigual, focalizada fundamentalmente en el centro, eso se profundiza con esta medida que ahora obliga a las personas que viven en los barrio periféricos a tomar dos o tres colectivos para llegar hasta el centro. Y demuestra, además, que aquí se prioriza el transporte como un negocio y no como un derecho de todos los trabajadores y vecinos».

El dirigente del MST también se despachó contra los sucesivos aumentos y enfatizó que nunca se dio cuenta sobre el destino de los «subsidios millonarios» que se recibieron para el transporte. Y disparó: «El Concejo Municipal se mira el ombligo, hay una realidad que no entra ahí porque están todo el día discutiendo cosas ajenas a los sectores populares, pero si van a cualquier barrio periférico van a ver que esta medida les empeora la vida a muchos ciudadanos».

Por su parte, Denise Barro, voz de los estudiantes dentro de la multisectorial hizo hincapié en el impacto que genera el aumento de la tarifa. «No sólo tenemos que esperar los colectivos el doble de tiempo, sino que aumentó a 45 pesos haciendo estragos en nuestra economía».

La joven también apuntó que «nadie se tomó la molestia de consultar realmente a usuarios y usuarias si las modificaciones que se hicieron eran realmente las que se necesitaban».