Tras el decreto firmado por el gobernador Omar Perotti, la mayor parte de la administración pública de la provincia de Santa Fe cesó las actividades desde este miércoles y hasta el 31 de enero.

Esta disposición tiene como objetivo ahorrar energía eléctrica y posponer pagos. Como así también, regularizar las licencias anuales ordinarias.

Algunas reparticiones quedaron excluidas: efectores de salud, Centros de Atención Primaria, el Intituto Autárquico Provincial de Obra Social (IAPOS), comisarías y subcomisarías, entre otras.