Los precios del petróleo se hundieron este lunes cerca de un 30%, su caída más fuerte desde la guerra del Golfo en 1991, después de que Arabia Saudita desatara una guerra de precios con grandes rebajas de sus barriles de crudo.

En los intercambios en Asia, el barril de WTI perdió un 30% mientras que el Brent cedió 26%.

La semana pasada la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP), liderada por Arabia Saudita, y sus socios petroleros, encabezados por Rusia, no lograron un acuerdo para reducir la producción y apoyar los precios, en un contexto de caída de la demanda por el coronavirus.

Tras el fracaso de las negociaciones, Arabia Saudita decidió el domingo el mayor recorte de sus precios del barril en 20 años, provocando además una tormenta en los mercados.

En Riad, la bolsa perdió más del 9% este lunes y las acciones de la petrolera nacional Aramco un 10%.

En paralelo las bolsas europeas vivían un lunes negro con caídas de hasta el 12% en algunos índices.

El hundimiento del precio del petróleo podría tener todavía más consecuencias, según los observadores.

«La caída del un 30% del precio del petróleo no tiene precedentes y está provocando una gran onda de choque en los mercados financieros», dijo Margaret Yang, una analista de CMC Markets.

Según la agencia Bloomberg, Arabia Saudí recortó entre 4 y 6 dólares el precio de sus barriles para entrega en abril con destino a Asia y en 7 dólares los destinados a Estados Unidos.

La petrolera nacional Aramco redujo además el barril de Arabian Light a un precio sin precedentes de 10,25 dólares, según la agencia.

El crudo de Brent cayó hasta US$14.25 por barril a US$31.02 en el ICE Futures Europe Exchange, con sede en Londres, la mayor pérdida intradía desde el bombardeo de Irak liderado por Estados Unidos en enero de 1991. Se redujeron algunas de esas pérdidas para comerciar 22% más bajo a US$ 35.39 por barril a las 8:04 am en Singapur.

El crudo West Texas Intermediate cayó un 22% a US$32.22 por barril después de caer hasta un 27% a US$30 por barril justo después de la apertura. El comercio se congeló durante los primeros minutos debido a la magnitud de la pérdida.

Si bien la caída de los precios fue dramática, para los especialistas en petróleo, los movimientos en los diferenciales de tiempo, las opciones y la volatilidad son igualmente notables. La estructura de precios de tres meses de Brent se amplió bruscamente a medida que el petróleo para entrega inmediata colapsó frente a envíos posteriores. Se adentró más en el contango, una señal bajista y de exceso de oferta, lo que hace que sea rentable para los comerciantes físicos comprar crudo y almacenarlo, ya sea en granjas de tanques en tierra o en el mar en petroleros.