Empresarios del sector gastronómico de la ciudad de Rosario se manifestaron durante el mediodía de este miércoles en las puertas de la sede de la Gobernación para “visibilizar la situación” por la que están atravesando debido a las restricciones impuestas en el marco de la pandemia de coronavirus.

Como ya lo hicieron una vez, los titulares de bares y restaurantes “autoconvocados” rompieron platos en plena vereda y luego conversaron con Conclusión.

Así, uno de los manifestantes, Jorge Sauan, se quejó de no tener respuestas del Gobierno de la provincia de Santa Fe.

“Este es un reclamo al Gobierno provincial para que agilice la ayuda que necesita nuestro sector. Es un pedido genuino, tenemos problemas para pagar los servicios, sueldos, aguinaldos, alquileres, expuso.

Más adelante señaló que “el pedido va de una asistencia al personal que se empezó a instrumentar, mal instrumentada porque el sindicato de Rosario, lo que no hizo el sindicato de Santa Fe ni el de Rafaela, está pidiendo que esta plata sea un bono para el empleado cuando en crisis está el sector y la ayuda tendría que ser para las empresas”

“Necesitamos también una ayuda en todos los servicios, hay un problema con Litoral Gas y nosotros no vendemos remeras, nosotros cocinamos, utilizamos el gas, pero Litoral Gas es palabra santa porque es una empresa privada, pero por lo menos que ejerzan algún tipo de presión hacia la empresa”, añadió Sauan.

Enseguida describió que “está grave la economía, ya se perdieron más de cien bares, 5.000 puestos de trabajo” y reconoció: “La verdad es que todos tenemos miedo de ser el próximo”.

Después de ser consultado acerca del pedido de extensión de horario que desde la Municipalidad de Rosario le hicieron al Gobierno provincial, el empresario manifestó que “por supuesto ayuda abrir hasta las 11”.

“La mayoría tenemos bares en los que el 80 % de la facturación se da después de las ocho de la noche, algunos bares más y otros menos, pero no hay que olvidar que se acumuló un gran pasivo en estos 16 meses en donde tengo la seguridad que los platos  tienen que ser pagados entre todos”, agregó y solicitó: “Creo que el gobierno provincial tiene que velar por el bienestar de los puestos de trabajo y de las empresas gastronómicas entre otras actividades que están en riesgo”.

“En todas partes del mundo se ha recibido una ayuda del Gobierno y acá todavía están viendo como instrumentarla a 16 meses, la verdad un verdadero papelón”, disparó.

Por su parte, otro titular de un negocio del rubro, Maximiliano Giménez, dijo: “Este es un modo genuino y seguro de visibilizar la situación. Confiamos en que en el diálogo con las autoridades y con nuestra asociación, este es un reclamo autoconvocado, no responde a la organización de ninguna asociación, es un reclamo de la actividad”.

“Confiamos en que el Gobierno se ponga a instrumentar rápidamente una ayuda eficaz porque siguen los cierres, producto de las restricciones, de los pasivos que se vienen acumulando. Son dieciséis meses, es casi un año y medio que estamos padeciendo una situación donde los negocios no pueden trabajar en un 100 % donde están los horarios restringidos y la capacidad restringida”, expuso.

Enseguida, agregó: “Pero impuestos, servicios, cargas laborales y demás siguen llegando, siguen siendo moneda corriente. Entonces desde ese lugar es donde nosotros hoy tratamos de visibilizar la urgencia que tiene esta situación”.

“El frío, la situación sanitaria y además de luchar con todo lo que es la situación de números y demás, tenemos que volver a explicarle al cliente que en nuestro espacio se cumplen todos los protocolos sanitarios, donde tomamos todas las medidas que hacen falta como el distanciamiento y donde proponemos burbujas para las familias se reúnan y puedan tener un encuentro social mucho más que en los hogares, o quizás en la nocturnidad de forma clandestina”, completó Giménez.

Finalmente, aseguró: “Siempre nos consideramos como parte de la solución de este problema, si bien la solución definitiva viene con la vacunación, siempre nos prestamos de esa manera. Ante cada restricción respondimos de forma positiva, no hay rebeldía, pero hoy lo que estamos manifestando es que así no se puede seguir más”.