La producción nacional de biodiésel cerrará 2020 con una caída del 30% interanual hasta las 1,56 millones de toneladas, debido a la crisis energética desatada por la pandemia de coronavirus que afectó la demanda del biocombustible, estimó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

De esta manera, se espera que la producción total caiga 610.000 toneladas respecto de 2019, y que se ubique un 35% del promedio de producción de los últimos cinco años.

Así, se prevé que la oferta total de biodiesel se ubicará en 1,65 millones de toneladas, sumadas las 92.000 toneladas de stocks iniciales con que arrancó el año.

Por el lado de la demanda, se estipula una baja del consumo interno de 30% interanual, tanto por «menor uso para transporte como para el resto de los usos», y del 26% en exportaciones.

En base a esto, se calcula que 800.000 toneladas se utilizarán en el país y 750.000 toneladas tendrán como destino el exterior.

La merma en la producción de biodiesel no sólo repercute en su actividad, sino también en el consumo interno de aceite de soja, su materia prima.

Según proyecciones de la BCR, la elaboración de este commodity caerá casi 500.000 toneladas respecto del 2019, al ubicarse en 7,6 millones de toneladas.

El consumo interno verá una retracción del 22% (unas 590.000 toneladas) hasta las 2,06 millones de toneladas, mientras que las exportaciones crecerán, según estimó la BCR, de 60.000 toneladas hasta los 5,45 millones de toneladas debido a «la fortaleza de la demanda asiática y la mayor competitividad respecto al aceite de girasol, que experimentó una suba abrupta en su precio».