Las ventas en los supermercados bajaron 12,1% durante febrero en relación a igual mes del año pasado, y en los grandes centros de compra el 17,6%, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Esta es la octava caída interanual consecutiva en las ventas tanto en los supermercados como en los grandes centros de compra, en la medición hecha a precios constantes, es decir, sin inflación y sin factores estacionales.

El personal ocupado en los grandes supermercados bajó 2,5% durante febrero al totalizar 97.845 empleados.

Los resultados de marzo tampoco serían favorables, según adelantaron diversas consultoras privadas que como el caso de Focus Market, estimó una merma del 12,3% en el consumo masivo, lo que marcó una caída del 10,8% en el primer trimestre.

«Las variaciones negativas son más profundas en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense que en Interior, lo cual habla de realidades diferentes, no solo desde el efecto de lo macro (como puede ser el caso del impacto del campo en el interior) sino también las diferentes dinámicas competitivas del comercio minorista en cada región”, destacó el informe.

En tanto, los estudios del Instituto de Trabajo y Economía de la Fundación Germán Abdala (ITE) informaron que el Indicador Mensual de Consumo (IMC) bajó 10,2% interanual.

A criterio de los investigadores del ITE en cuanto a la salud de la economía “el consumo continúa en franca caída y todavía no ha alcanzado un piso”. Cualquier percepción a corto plazo genera “riesgos sobre exactitud para cualquier diagnóstico”.

En tanto, para la consultora Ecolatina “es esperable que el consumo privado continúe en terreno negativo a lo largo del primer semestre”, mientras que Econométrica consideró que en este segundo trimestre, el consumo privado mostrará una caída de 8,4% interanual.

“La dinámica inflacionaria todavía no permite una recuperación del consumo, pero las paritarias, los aumentos de Asignación Universal por Hijo (AUH) y jubilaciones otorgarán un respiro”.

En este marco, el Gobierno lanzó la semana pasada una serie de medidas para atenuar la inflación, como una canasta de 64 productos con precios acordados, suspender la suba de tarifas, y brindar créditos a los sectores con mayores dificultades como jubilados y beneficiarios de la AUH.

Uno de los encargados de explicar los alcances de este paquete de medidas fue el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, quien destacó que «estas son medidas para generar un alivio a las familias y que en esta nueva etapa se ganará la batalla contra la inflación».

Dujovne puso de relieve que «estamos dejando atrás la inestabilidad cambiaria que vivimos con mucha crudeza el año pasado y que explica en buena medida la inflación tan alta que vimos en marzo y en abril».

«En estos dos meses, agregó, tuvimos un nivel de inflación anormalmente alto, vinculado a la inestabilidad cambiaria que se siguió traspasando a precios», añadió un día después de que el Indec revelera que el índice de precios al consumidor de marzo había llegado al 4,7 %.