Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires (enviado especial)
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, concurrió nuevamente al Congreso este miércoles y brindó el segundo informe del año ante la Cámara de Diputados. La sesión estuvo marcada por los cruces entre oficialismo y oposición. El funcionario señaló que se está «saliendo de la recesión y el empleo está en proceso de crecimiento».
Peña entregó el informe número 101 de la jefatura de Gabinete de ministros con respuestas a las 990 preguntas que previamente formularon por escrito los legisladores de los bloques que integran el cuerpo, en torno a la situación socio-laboral del país, la política previsional, la política energética y el reciente fallo de la Corte Suprema de Justicia sobre el beneficio del 2×1 a condenados por delitos de lesa humanidad, entre otros temas.
Durante el transcurso del informe, Peña no se privó de vincular al kirchnerismo con las coimas de Odebrecht, avaló a Arribas de la AFI, y cruzó chicanas con diputados del Frente Renovador. Además, destacó el relevamiento de barrios populares hecho por el Gobierno, y afirmó ante los diputados que “Argentina salió de la recesión”. Desde la oposición ironizaron llamándolo «Peña Braun».
Según el funcionario, la economía viene creciendo hace 4 trimestres y se consolidó la tendencia, y «algunos sectores arrancaron mas fuerte», puesto que hay «12 de 15 sectores que así lo demuestran».
Además, destacó que aumentaron las «inversiones y la exportación de 5 y 4,2 % respectivamente”, y estimó que el crecimiento de 2017 “puede ser del 3%, el más alto desde el año 2011», precisó.
En relación al empleo, Peña indicó que los datos del ministerio de Trabajo muestran que el empleo privado tuvo en febrero de este año 6.224.337 trabajadores asalariados «en blanco», es decir, una reducción del 0,4% con respecto a 2016, representan «107.280 empleos formales creados en el sector privado», reveló.
Sobre las inversiones, el jefe de ministros informó que existe un notable aumento de las ya anunciadas «extranjera como local» para iniciativas «en todo el país y en todos los sectores», a las que «hay que cuidar porque todavía son incipientes». Y subrayó que será «muy importante a futuro «bajar la tasa de interés y el costo argentino» para tentar inversiónes de largo plazo y a «un costo sustentable».
Peña sostuvo que hay que seguir luchando contra la inflación para llegar al objetivo de «un dígito que tiene la enorme mayoría de los países de la región y del mundo», prometió aproximarse a la meta del Banco Central para este año, “entre el 12 y el 17 por ciento” y arremetió diciendo que se dijo mucho sobre «combatir los monopolios y romper la cartelización, pero lo único que se logró, por voluntad o por impericia, fue consolidarlo», en clara alusión a la política del kirchnerismo.
«La obra pública está claramente en marcha en el plan de infraestructura más ambicioso y más transparente de la historia argentina. Ya hay más de 1.200 kilómetros de autopista en obra en este momento, reactivamos grandes proyectos de infraestructura vial, con el objetivo de construir 2.800 kilómetros de autopistas nuevas en cuatro años, y 20.000 kilómetros de rutas en todo el país».
